Mascarillas Bejar ha optado por reforzar su producción de mascarillas FFP2 en la tercera ola de la pandemia, así como su apuesta tecnológica de innovación. La compañía ha creado una amplia línea de productos de protección sanitaria que cuenta con todas las licencias y reglamentaciones europeas de seguridad y protección, así como con las licencias y normativas de calidad y protección españolas.

Entre otros, los productos de protección elaborados por Mascarillas Bejar cuentan con la licencia AITEX, normalización UNE y de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios y certificados ISO 13485:2016 y 9001:2015, entre otros.

El fabricante de mascarillas nacional ha querido también reivindicar la necesidad de informar a los ciudadanos sobre los peligros de las mascarillas no homologadas y el uso de las mascarillas de tela que no cuentan con los filtros TNT adecuados, “cuyo uso indiscriminado sin protección incrementa el contagio en los contactos sociales y laborales de forma creciente, como ya advirtió la OMS en los últimos informes sobre su uso”.

“La seguridad siempre ha sido y es un valor esencial en Mascarillas Bejar, que apostó desde el principio de la pandemia por las mascarillas quirúrgicas tipo IIR, las de mayor protección, y por su modelo innovador y nanotecnológico NAN300, con líneas propias y de diseñadores españoles”, explican desde la compañía, haciendo referencia a la nanotecnología de comportamiento y protección máximo.

Tercera ola de la pandemia

Ahora, con las nuevas mascarillas FFP2 se amplía la oferta de protección de producción propia española. Para la compañía, supone “la tranquilidad de que, en nuestro país, y desde nuestras empresas, podemos dar respuesta a la pandemia en una tercera ola que está demostrando su virulencia”.

Las mascarillas están confeccionadas en su totalidad en España y protegen frente a la transmisión aérea de los aerosoles, que han resultado ser más persistentes en el ambiente y en entornos cerrados de lo que se informó en los primeros informes internacionales, según ha confirmado la OMS en reiterados informes.

En Mascarillas Bejar dejan patente su persistencia y preocupación en ofrecer a sus clientes la mejor calidad y protección en cuanto a mascarillas se refiere, lanzando su línea de FFP2 y reivindicando así su papel frente al coronavirus, que vuelve a estar en el punto más álgido de infección. Estas mascarillas tienen un índice de protección y filtración mayor al 95%, lo que las convierte en referente de la producción nacional e internacional de este producto sanitario.

Además de la línea de FFP2, la compañía ofrece también sus mascarillas quirúrgicas IIR, indicadas para protección y uso hospitalario, y que, además, han sido puestas al alcance de todos gracias a su web de venta online y directa. Esta preocupación por la seguridad y la protección ha llevado a la firma a desarrollar estudios en cuanto a tejido nanotecnológico y a recibir por ello el premio a la innovación por sus mascarillas NAN300, reutilizables hasta cinco lavados y pueden utilizarse durante seis horas.

Mascarillas Bejar ha centrado su trabajo, además de en la investigación en cuanto a ofrecer el producto con el mayor índice de protección, en fomentar el empleo de calidad y la recuperación industrial de la zona, dado que sus trabajadores son de municipios cercanos y ha pasado de seis trabajadores en sus inicios, a más de 100 en plantilla, contratando a más de 20 operarios nuevos para así poder hacer frente con garantías a esta tercera ola en la que nos encontramos.