Endesa prevé repartir alrededor de 5.970 millones de euros entre sus accionistas en concepto de dividendos para el periodo 2019-2022. Sin embargo, ha anunciado el recorte del porcentaje de beneficios destinado a los accionistas (pay out) a partir de 2021. En concreto, ese año recortará el beneficio ordinario neto al 80% y el 70% el año siguiente, en 2022. La compañía confía en mantener los niveles de generación de caja y endeudamiento de la sociedad y cumplir "el objetivo de asegurar la sostenibilidad del proyecto empresarial".

La energética ha enviado la actualización de su plan estratégico a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), donde especifica el pago de dividendo para este y los próximos años. Así, este 2019 entregará un dividendo mínimo de 1,4 euros brutos por acción, en 2020 1,6 euros, en 2021 un mínimo de 1,4 euros y en 2022, 1,3 euros brutos por acción.

Para conseguir esta retribución, Endesa estima un crecimiento anual de su beneficio neto de un 8%, frente al 7% del ejercicio anterior, hasta lograr unas ganancias de 1.900 millones de euros en 2022. En la misma línea, la compañía prevé un crecimiento constante de sus ganancias, que en el periodo de cuatro años alcanzaría los 6.900 millones de euros.

Eliminar las centrales de carbón en 2022

Por otro lado, la compañía está inmersa en su impulso a las energías renovables, a las que destinará casi la mitad de las inversiones en los próximos cuatro años y confirma la aceleración para eliminar sus centrales de carbón en los próximos años. De esta forma, se espera que en 2022 desaparezcan las centrales de carbón, concretamente las centrales de Compostilla (León), Andorra (Teruel), Litoral (Almería) y As Pontes (A Coruña).

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Para hacer frente a las pérdidas de más de cuatro gigavatios de potencia derivada del carbón, Endesa aumentará su capacidad instalada en energías renovables en un 40% hasta los 10,2 gigavatios. Endesa convertirá a las energías verdes en las grandes protagonistas de su proyecto en los próximos cuatro años, principalmente a la energía solar, con 1,9 GW, y a la energía eólica, con 900 MW.

Enel, principal accionista de Endesa, ya ha confirmado un impulso a las inversiones de la energética española hasta los 6.300 millones para el periodo 2020-2022. Así, Endesa invertirá en los próximos cuatro años un total de 7.700 millones de euros, un 20% más que en el ejercicio anterior. Del total, 3.800 millones se destinarán a las energías renovables y el resto se dividirá entre redes y digitalización. La compañía también estima un crecimiento de su deuda neta, hasta los 8.500 millones de euros en 2022, para impulsar este crecimiento.