El primer semestre de 2021 ha supuesto una remontada para el sector automovilístico ya que la ventas de coches se han elevado en comparación con el hundimiento que sufrió el sector durante los meses más duros de la pandemia. No obstante, el sector se pone de nuevo en marcha con algunos cambios de tendencias y con un porcentaje del 34,5%  inferior al que se produjo en el año 2019. 

En este 2021 ha aumentado la venta de coches híbridos e híbridos enchufables frente a los de gasolina y diésel.

El coche del año

En este primer semestre de 2021 el Seat Arona es el modelo de coche más vendido en España. Hasta ahora su puesto lo había ocupado el Seat León. A éste le siguen el Citroën C3, Seat Ibiza, Fiat 500, Hyundai Tucson y Peugeot 208 como podemos observar en el siguiente ranking elaborado por la OCU

Por su parte, salen de la lista: Dacia Sandero, Nissan Qashqai, Renault Clio, Renault Captur y Hyundai Kona.

Apuesta por la movilidad eléctrica 

Una buena noticia para la sostenibilidad y el medioambiente es que cada vez son más los coches ECO y 0 emisiones que incrementan en ventas. De hecho por primera vez las ventas de coches híbridos han superado a las de gasóleo. ¿Por qué? En parte por las subvenciones que se están otorgando a la movilidad sostenible. Por ejemplo, a través del Programa de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible (Moves), la diferencia de precio entre vehículos de gasolina, eléctricos e híbridos es más pequeña que nunca.

De hecho, el Plan Moves III, aprobado en el mes de abril de este año, cuenta con un presupuesto inicial de 400 millones de euros, ampliable por otros 400 millones. El objetivo del proyecto es que en el año 2050, España pueda alcanzar una movilidad sin emisiones, colaborando en la hoja de ruta de Europa que pretende  convertirse en el primer continente del mundo con cero emisiones netas para esa fecha. 

Por su parte, la Comisión Europea (CE) ha elaborado un borrador con nuevas propuestas para prohibir la venta de coches que no sean “cero emisiones” en 2035. Por ende, la CE insta a los diferentes Gobiernos a instalar al menos un punto de carga para vehiculos eléctricos cada 60 km en las carreteras principales. En el caso de los  automóviles eléctricos con pila de combustible de hidrógeno, las hidrogeneras deberían situarse cada 150 kilómetros.