CaixaBank ha ganado un 21,1% más hasta el mes de marzo y ha cerrado el primer trimestre del año con un beneficio neto atribuido de 855 millones de euros. La entidad celebra la solidez, el dinamismo comercial y la fortaleza de balance en sus cuentas financieras del primer trimestre, presentadas este viernes poniendo fin a la temporada de resultados de las grandes empresas, todo ello a pesar de un contexto marcado todavía por la incertidumbre financiera.
El consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, ha celebrado las cuentas trimestrales de CaixaBank y su relación con la sociedad. "Este resultado supone una buena noticia no solo para nuestros accionistas, entre los que destacan la Fundación “la Caixa” y el FROB, sino también para nuestros clientes, porque refleja nuestra capacidad para apoyar sus necesidades, y para la sociedad, porque contar con un sector financiero fuerte y confiable es clave para dinamizar la economía y la actividad empresarial”.
CaixaBank aporta 373 millones a las arcas públicas por el impuesto
La entidad ha desgranado en sus cuentas los detalles del pago del impuesto extraordinario a la banca, por el que CaixaBank ha desembolsado en el primer trimestre un importe total de 373 millones de euros. Una cantidad que va directa a las arcas públicas, con el objetivo del Gobierno central de frenar la espiral inflacionista y el encarecimiento del coste de la vida, y que se suma a los pagos de los que ya han informado el resto de entidades financieras.
El pago del gravamen extraordinario y temporal ha supuesto para CaixaBank reducir su beneficio un 30% aunque mantiene el crecimiento de su margen en términos brutos, descontando el impacto del impuesto. De hecho, el margen bruto de la entidad crece un 16,7% en el primer trimestre, hasta los 3.101 millones de euros. Además, el incremento de los gastos de administración y amortización recurrentes en un 2,4% hace que el margen de explotación aumente un 33,4%, hasta los 1.659 millones de euros.
Los inversores han recibido los resultados de CaixaBank con repuntes de la acción de más del 2% en los primeros momentos de la sesión en el parqué madrileño. CaixaBank cotiza en el Ibex 35 en los 3,23 euros por acción recuperando así parte de las caídas en bolsa sufridas esta semana.
En cifras puramente financieras, CaixaBank celebra la evolución positiva interanual de todos los márgenes, tendencia con la que la entidad justifica la mejora del beneficio del 21,1%. Además, esto permite que la rentabilidad ROTE de CaixaBank haya alcanzado el 10,5% -todavía por debajo del coste de capital pero por encima del 7,6% del primer trimestre de 2022- y que la ratio de eficiencia mejore hasta el 48,2% en el arranque de 2023.
Por otro lado, los recursos de clientes se sitúan en los 614.608 millones de euros, con un crecimiento del 0,5% en el primer trimestre, después de que la entidad haya logrado unas suscripciones netas cercanas a 3.800 millones de euros, con especial pujanza de los fondos de inversión y los seguros de ahorro, tal y como reconocen ahora en sus cuentas financieras. En esta línea, Gortázar ha presumido de contar en el primer trimestre “con una muy buena dinámica comercial en un periodo en el que la economía se ha mostrado más resiliente de lo previsto”.
La entidad mantiene el crédito y reduce la morosidad hasta mínimos históricos
La producción de crédito interanual continúa aumentando en todos los segmentos de negocio, con una mejora del 6% en el sector de las hipotecas, un 4% en el consumo y un 21% más en el crédito a empresas. El crédito sano de CaixaBank ha alcanzado los 351.215 millones de euros en los primeros meses del año y se mantiene estable a pesar del aumento de las amortizaciones, principalmente en el segmento hipotecario.
Y es que CaixaBank ha registrado en el primer trimestre una evolución positiva de sus ingresos core, hasta alcanzar 3.449 millones de euros, un 30,4% más. El margen de intereses de la entidad mejora un 48,6% en los primeros meses del año hasta 2.163 millones de euros, mientras que las comisiones netas se mantienen estables, con apenas una décima de crecimiento, en los 937 millones de euros. Dentro de este epígrafe, los activos bajo gestión suben hasta 154.007 millones de euros, un 4,1% más en el primer trimestre, no solo por la evolución favorable de los mercados, sino también por unas suscripciones netas positivas cercanas a 3.800 millones de euros, con especial pujanza de los fondos de inversión y los seguros de ahorro, según destaca la entidad en sus cuentas trimestrales.
Por otro lado, los resultados de entidades valoradas por el método de la participación, esencialmente procedentes de participadas de bancaseguros, suman 79 millones al cierre del mes de marzo y el resultado del servicio de seguro, la nueva línea de la cuenta de resultados derivada de la entrada en vigor de la normativa NIIF 17, asciende a los 263 millones de euros.
La morosidad continúa en mínimos históricos en el 2,7%, eliminando cualquier riesgo y desmintiendo los augurios más catastrofistas, con una ratio de cobertura del 76% tras subir dos puntos desde diciembre. Además, los saldos dudosos de CaixaBank descienden hasta los 10.447 millones de euros, con una reducción de 243 millones de euros en el trimestre. Asimismo, la entidad mantiene su "privilegiada" -en palabras del CEO de CaixaBank- posición en liquidez y solvencia, en niveles "óptimos" con más de 132.800 millones de euros de activos líquidos y una cómoda ratio de capital del 12,6%.
CaixaBank aumenta los ingresos por dividendos gracias a su participación en otras cotizadas
CaixaBank ha registrado en sus cuentas un aumento de los ingresos por dividendos, hasta 68 millones de euros, tras el registro de la totalidad del dividendo de Telefónica durante este primer trimestre del año.
El banco refleja también en las cuentas trimestrales su actividad en materia inmobiliaria y asegura que cuenta con 11.207 pisos en su programa de alquiler social. Asimismo, CaixaBank es una de las grandes participadas de la Sareb y, según las cifras de la compañía, ha aportado más de la mitad del total de inmuebles que el sector ha cedido al Fondo Social de Viviendas.
La positiva evolución de los resultados de CaixaBank y su fortaleza financiera permiten a la entidad continuar apoyando a familias, empresas y a la sociedad en su conjunto. La entidad destaca, más allá de las cifras económicas, su compromiso con la mejora social como parte de su ADN y que se refleja en su apuesta por la inclusión financiera, el apoyo a los colectivos más vulnerables, la formación y el impulso al emprendimiento, entre otros aspectos.
La fuerte participación de Fundación "la Caixa" y el Estado, a través del FROB, en el accionariado de CaixaBank permiten que el beneficio obtenido por la entidad revierta a la sociedad. Un mensaje que refuerza una vez más la entidad recordando que, de los 1.730 millones de dividendos abonados el pasado 12 abril gracias a los resultados de 2022, alrededor de 850 millones tienen un destino social ya que han ido a manos de estas dos instituciones, propietarias de prácticamente la mitad del capital del banco.
