Bankia ha presentado este martes los resultados correspondientes al segundo trimestre del año, marcado por la crisis del coronavirus. En cifras, la entidad ha registrado un beneficio neto de 142 millones de euros, un 64% menos que en el mismo periodo del año anterior, por las provisiones de 310 millones que la compañía ha reservado para paliar el impacto de la pandemia.

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Los directivos se han mostrado satisfechos con estos resultados, a pesar del impacto del Covid-19 y no han descartado procesos de fusión o consolidación en los próximos meses.

José Sevilla, consejero delegado de la entidad, ha reconocido que “en un entorno de tipos de interés negativos, en el que la rentabilidad de las entidades se ve muy negativamente afectada, hay un incentivo para las fusiones, que tienen que tener lógica industrial y lógica financiera”.

“Hemos sido de las pocas entidades que ha llevado a cabo un proceso de fusión en estos años, con BMN. Por lo tanto, es posible pensar que en este contexto haya un cierto incentivo para procesos de consolidación. Lo veremos a lo largo de los próximos meses”, ha avanzado Sevilla.

Además, el CEO de Bankia ha celebrado que el Banco Central Europeo haya publicado una guía con indicaciones para las posibles fusiones entre las entidades bancarias: “Es posible que eso genere un caldo de cultivo favorable para ver algún proceso de consolidación adicional en los próximos meses”.

Por otro lado, Bankia ha hecho hincapié en la digitalización de la entidad, con aproximadamente la mitad de sus clientes digitales. Preguntado por el posible cierre de oficinas, el consejero ejecutivo ha explicado que están llevando a cabo una sustitución de los asesores remotos frente a los asesores físicos tradicionales de las oficinas bancarias. “Los clientes se digitalizan a la velocidad que ellos quieren”, ha reconocido Sevilla.