Banco Santander tiene un firme compromiso con las empresas españolas, a las que ofrece diversas soluciones financieras que impulsan su crecimiento y rentabilidad, y a las que acompaña en su transición hacia una economía verde. Una de las compañías que ha contado con el apoyo del Santander es Wallbox, que desarrolla soluciones de carga de vehículos eléctricos de última generación para hogares, empresas y ciudades, poniendo a disposición formas más eficientes y sostenibles de usar y compartir la energía.
Esta firma española nació en 2015 y en 2017 recibió el impulso del banco a través del Fondo Smart. El pasado mes de junio, Ana Botín, presidenta de Grupo Santander, junto a António Simões, responsable regional de Europa y consejero delegado de Santander España, recorrieron las instalaciones de la empresa en Cataluña. En su visita, conocieron de primera mano los productos que han lanzado durante los últimos 6 años y cómo ha sido su expansión en países como China o Estados Unidos.
Enric Asunción y Eduard Castañeda, fundadores de la empresa, explicaron la importancia que tuvo contar con el apoyo del banco en sus inicios: “la apuesta que hicisteis hace 4 años con estos 2,4 millones de euros es, en parte, lo que ha permitido que Wallbox sea lo que es hoy”. Por su parte, Botín comentó su confianza en el éxito del proyecto desde su inicio, en el tipo de gobernanza y en su equipo. “El éxito de Wallbox se basa en la innovación, talento, ambición y trabajo de Enric, Eduard y su equipo para cambiar el mundo. Un orgullo que desde 2017 hayamos apoyado desde el Santander esta visión de un mundo más sostenible, más digital y más verde”.
La esencia sostenible de esta compañía se refleja incluso en su infraestructura. “Todas las oficinas y las instalaciones de la empresa están hechas bajo el concepto cradle-to-cradle, en el que los muebles, las moquetas y todos los materiales constructivos son reciclables al 100% a nivel molecular”, explica uno de sus fundadores. Wallbox, que también fue reconocida en los Premios Pyme del Año 2020 que otorgan el Santander y la Cámara de Comercio, se ha convertido en el primer unicornio español (startups o empresas tecnológicas que han conseguido aumentar su valor con rapidez) que cotiza en el mercado, gracias a su imparable crecimiento debido a la inversión en tecnología e innovación. Además, los responsables de la empresa apuestan por captar el mejor talento e incluir cada vez más a mujeres ingenieras en el equipo, a pesar de la dificultad de encontrar este tipo de perfiles especializados.
La sostenibilidad, en la esencia de los objetivos de banca responsable
El Santander apoya a sus clientes hacia una economía baja en carbono. Entre los objetivos de banca responsable del Santander, la entidad se ha comprometido a facilitar más de 120.000 millones de euros en financiación verde de 2019 a 2025, y alcanzar los 220.000 millones de euros hasta 2030 para combatir el cambio climático.
La entidad es líder en financiación de proyectos renovables en España y el mundo, tanto por volumen de financiación como por número de operaciones, según el ranking elaborado por Dealogic de 2020. Durante el pasado ejercicio, el Santander participó en España en un total de 28 operaciones con un importe conjunto de 1.170 millones de euros, lo que representa un 17,4% del total de la actividad en el país y supone revalidar la primera posición por quinto año consecutivo. Además, la división de Corporate & Investment Banking del banco en España ostenta el liderazgo en asesoramiento de deuda (advisory debt) en el sector de renovables, con 1.500 millones de euros atribuidos, y en número de proyectos de energía renovable (green project bond) que ha coordinado, con un total de 15, según esta misma fuente.
En este sentido, en servicios de asesoría, participan de forma activa en la financiación de nuevos proyectos con un impacto medioambiental positivo y apuestan por convertirse en un referente internacional en finanzas sostenibles a través del refuerzo de su oferta de productos y soluciones ASG para apoyar a sus clientes de banca corporativa e inversión en sus estrategias hacia modelos sostenibles.
También ofrecen productos verdes a particulares y pymes o empresas como hipotecas verdes, préstamos para la eficiencia energética, arrendamientos para la instalación de energías renovables o préstamos para el transporte limpio o para la agricultura baja en carbono. Además, disponen de líneas de financiación con organismos multilaterales para proyectos de eficiencia energética y energía renovable, como, por ejemplo, el Banco Europeo de Inversiones (BEI).