Los máximos protagonistas del diálogo social se han sentado a la mesa este martes para debatir sobre los retos del mercado laboral. No se ha tratado de una reunión privada al uso, como viene siendo habitual, sino todo lo contrario. Los líderes de los sindicatos -Pepe Álvarez, secretario general de UGT, y Unai Sordo, secretario general de CCOO- han compartido mesa en la Universidad Complutense con los representantes de la patronal de empresarios -Antonio Garamendi como presidente de CEOE y Gerardo Cuerva por parte de Cepyme- acompañados por Amelia Pérez Zabaleta como moderadora, decana-presidenta del Colegio de Economistas de Madrid, durante una conferencia organizada por la institución en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Complutense de Madrid. 

Los líderes del diálogo social han coincidido el día que se han conocido los datos de paro y afiliación a la Seguridad Social correspondientes al mes de septiembre,  apenas una hora antes de su encuentro. Una valoración que, no obstante, ha estado marcada por una clara diferencia de opinión entre el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, y el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva. El representante de las pymes comenzaba su intervención asegurando que “el empleo se genera en la empresa privada”. “Sin empresas no hay empleo”, afirmaba rotundamente Cuerva. Una afirmación a la que respondía justamente después el secretario general de UGT: “El señor Cuerva ha dicho que sin empresas no hay empleo. Le digo otra cosa: sin trabajadores no hay empresas”. Cada uno sentado en un extremo de la mesa han protagonizado un momento que ha terminado entre risas pero con una frase clave de Álvarez sobre la negociación bipartita del diálogo social: “Podríamos empezar aquí un debate para demostrar cómo funciona el diálogo social”. 

Bajo el nombre “El diálogo social. Los retos del mercado laboral”, los líderes a un lado y otro se han felicitado por el proceso de diálogo tripartito, con la presencia del Gobierno en las negociaciones entre empresarios y sindicatos. Un mensaje de felicitación por el papel del Gobierno cuyo presidente en funciones, Pedro Sánchez, se reúne a unos pocos kilómetros con el rey Felipe VI para avanzar en la investidura. “El diálogo social es tripartito, no bipartito” -comenzaba su intervención el máximo representante de los empresarios españoles, Antonio Garamendi, para matizar después- “Tenemos el mismo interés común por el bien de nuestro país pero diferentes puntos de vista”.

La patronal evita comentar los datos récord de empleo

Por otro lado, los líderes sindicales han analizado los datos de paro de septiembre por el carácter estacional del mercado laboral español, marcado por la caída en el sector servicios y, especialmente, la hostelería y el turismo. “En septiembre se han vuelto a destruir empleos del sector servicios y la hostelería y se han recuperado en el sector de la enseñanza. Es un problema estructural. Aunque estemos en récord histórico de paro y afiliación a la Seguridad Social, no nos podemos conformar. España está en la posición de conseguir una mejora del empleo”, ha explicado Unai Sordo.

Una valoración que ha ratificado el presidente de la patronal con una frase -“estamos de acuerdo”- pero sin entrar a hacer más valoraciones sobre los datos conocidos esta mañana. De hecho, los líderes de los empresarios han sido los primeros en salir de la sala en la que se celebraba la conferencia, sin hacer declaraciones posteriores a los medios de comunicación.

Por su parte, el líder sindical de UGT, Pepe Álvarez, ha puesto sobre la mesa los problemas actuales del mercado laboral tras conocer los datos de paro. “Hay un incremento importantísimo de los parados de larga duración, consecuencia directa de la reforma laboral. Por haber menos rotación, hay menos gente que se incorpora al mercado laboral”. Más allá de los problemas estructurales, el secretario general ha denunciado “un problema muy serio de empleabilidad”. “No podemos pensar que estamos en pleno empleo y no poder recalificar o formar para que los parados puedan encontrar un empleo. Es uno de los problemas más importantes que tiene la economía española”, reclama el líder sindical. 

La subida del salario mínimo centra el debate

Más allá de la valoración de los últimos datos de paro y afiliación -desde Cepyme y CEOE no han realizado apenas comentarios sobre los últimos datos- el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha centrado el debate público entre sindicatos y empresarios ante los estudiantes de la Complutense. Una medida en la que las partes tienen dos posturas completamente diferentes. “Subir el salario mínimo es como si el Estado te invita a cenar pero pagas tú. Por eso habría que debatirlo en el diálogo social, no que sea simplemente una consulta. Subir el salario mínimo hoy sería un problema porque rompería todas las bandas”, comenzaba Garamendi sobre la subida del SMI. 

Una postura que ha llevado más allá el presidente de Cepyme: “Los salarios no deberían corresponder a una política electoralista o de carácter social. El salario es una contraprestación por hacer un trabajo”. Cuerva llama entonces a tener “ayudas coyunturales” solo en el caso de “salarios con los que la gente no puede vivir”. Sin embargo, defiende que “el camino no es aumentar el salario mínimo, sino mejorar el sistema productivo y económico”. “No convirtamos las ayudas en una situación crónica y estructural. Defendemos las ayudas coyunturales pero que España no sea un país de ayudas estructurales”, reitera Cuerva. 

Al otro lado del mesa, y con la moderadora entre medias, Sordo y Álvarez han defendido la subida del salario mínimo como “la mejor herramienta para mejorar la productividad”. Ante las críticas de que se utilice con “fines políticos”, el secretario general de UGT ha defendido: “la mejor forma de despolitizar el salario mínimo es que por ley se actualice de forma automática, como se ha hecho con las pensiones. Ya no tendrá que formar parte de la vida política si no se quiere”. “Creo que el SMI no pone en riesgo la viabilidad de las empresas”, ha culminado el debate público el secretario general de UGT.