La empresa francesa Novacyt lanzó hace once días un test molecular para detectar el coronavirus. Las reaccionas positivas no han tardado en aparecer y las acciones de la compañía se han disparado en la Bolsa de París, tanto que en lo que va de año ya se han revalorizado un 426,63%.  

En la jornada bursátil de hoy, las acciones de Novacyt, una pequeña cotizada francesa valorada en 48,7 millones de euros, caen un 6,85% hasta los 0,83 euros después de que ayer registrara una subida del 47,6%, tras los primeros datos conocidos de la venta de su nuevo test. A pesar de la caída registrada en la jornada de hoy, el precio de las acciones es más de diez veces superior que los mínimos registrados en el último año.

"En siete días se han recibido 33.000 pedidos firmes y está apalabrada la venta de otros 32.000 tests, con un alto ratio de conversión de las órdenes apalabradas a los pedidos en firme, los directores creen que la empresa está bien situada para cubrir la creciente demanda global de test de coronavirus", ha afirmado la empresa francesa en un comunicado.

La biotecnológica, especializada en la venta de productos de diagnóstico para enfermedades infecciosas, lanzó un test molecular que permitía la detención del coronavirus el pasado 31 de enero, anunciado como el único que permite diferenciar la cepa de la actual epidemia de otras, lo que permite evitar falsos diagnósticos.

El mismo día del anuncio, las acciones de la compañía ganaron un 81,12% en la Bolsa de París, llegando a cotizar hasta los 0,697 euros por acción. En apenas dos jornadas se intercambiaron casi 100 millones de euros en acciones de Novacyt y desde el anuncio el 31 de enero, las acciones se han revalorizado un 106%.

Este es el mejor ejemplo de las empresas que han sabido aprovechar el impacto del coronavirus de una forma positiva, al igual que ha ocurrido con los fabricantes de mascarillas a nivel mundial, que han multiplicado su producción durante las últimas semanas por el miedo de la población al contagio del coronavirus.