¿Qué es ser autónomo?

Un autónomo es la persona física que trabaja por cuenta propia de manera habitual y con fines lucrativos. También se le conoce como empresario individual y una de sus principales obligaciones es la de responder personalmente ante la Seguridad Social. Para ello, debe darse de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Solo cuando la persona solicita este ingreso es considerado, a efectos legales, trabajador autónomo.

Trabajar como autónomo: tipos y definición

Este sector de la población activa carece de un contrato que le vincule a un empleador o que establezca sus derechos y obligaciones laborales. En consecuencia, tampoco cuenta con una figura superior que le garantice un salario a final de mes sean cuáles sean los resultados. Los autónomos corren riesgos ilimitados en el desarrollo profesional y dependen, exclusivamente, de su propio rendimiento. En cualquier caso, su actividad queda protegida y regulada en el Estatuto del Trabajador Autónomo.

Ejemplo:

Para darse de alta como autónomo hay que llevar a cabo una serie de trámites burocráticos en distintas instituciones. Lo primero que has hacer es darte de alta en Hacienda, donde debes presentar la declaración censal comunicando la actividad económica. Una vez hayas realizado esta gestión, debes darte de alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) de la Seguridad Social”.

Darse de alta como autónomo

La figura del autónomo es la más habitual en sectores como el comercio al pormenor o actividades como la fontanería o la carpintería. Pero cada vez son más los profesionales que se suman a esta forma laboral para mejorar su situación. Para darse de alta como autónomo son necesarios una serie de requisitos:

1.     Trámites en Hacienda. Es el primer paso necesario antes de ponerse a trabajar como autónomo. En la delegación de Hacienda se hace efectivo el alta censal y, al mismo tiempo, en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).

2.     Trámites en la Seguridad Social: para solicitar el alta en el RETA. Durante el ejercicio de la actividad profesional, estos trabajadores tendrán que pagar mensualmente a la Seguridad Social la cuota de autónomos. Los nuevos trabajadores por cuenta propia pueden beneficiarse de una serie de bonificaciones que reducen el pago de esta cuota de autónomos durante un periodo más extenso.

 La tarifa plana de 50 euros de cotización a la Seguridad Social para nuevos autónomos pasa de 6 a 12 meses para nuevos autónomos o aquellos que no lo fueron en los dos últimos años. La medida beneficiará a 140.500 personas durante 2018, que se ahorrarán un total de 202,4 millones de euros”.

Tipos de autónomos

-     Autónomo económicamente dependiente (TRADE). Son aquellos que facturan, al menos, el 75% de sus ingresos a un solo cliente.

-      Autónomo societario. Son los que administran una sociedad mercantil.

Ejemplo

Desde comienzos de año, cerca de un millón de autónomos societarios ha sufrido una subida del 8% en su base mínima de cotización, con lo que pagan 25,53 euros más de cuota mensual respecto a 2016 y unos 300 euros extra al año, ya que la cuota subirá a 344 euros al mes”.

-     Autónomo colaborador. Es el cónyuge o un familiar del empresario o propietario del negocio para el que trabaja de manera habitual.

A estos tipos de autónomos legalmente reconocidos, debemos añadir la del ‘falso autónomo’, una figura cuya presencia ha ido creciendo de manera notable como consecuencia de la crisis. Estos trabajadores figuran en el RETA, pero, en realidad, ofrecen sus servicios a una sola empresa. Es decir: son empleados de esta compañía, pero son ellos los que cotizan a la Seguridad Social como trabajadores por cuenta propia. Es una posición laboral falsa puesto que no son autónomos como tal, sino que dependen de las peticiones y exigencias de la empresa. 

Ejemplo

Las cifras sumadas “al abuso, en muchas ocasiones fraudulento, de las prácticas no laborales, de la situación de absoluta carencia de derechos que rodea la figura del `falso autónomo´, al empleo sumergido, al paro o al riesgo de pobreza o exclusión social reflejan una creciente e inaceptable precarización social y económica que golpea en su día a día a la inmensa mayoría de jóvenes “, reivindica el comunicado de Jóvenes de CCOO”.