Los préstamos rápidos son una fórmula financiera que gana cada vez más adeptos. Su funcionamiento básico es la entrega prácticamente inmediata de cantidades suficientes de dinero, incluso de decenas de miles de euros, pero mediante un proceso de solicitud más accesible que con otras fórmulas tradicionales.

La norma general es un tiempo de respuesta desde la plataforma, pues son plataformas crediticias quienes operan con este sistema, de unos 15 minutos en el mejor de los casos. Cuando la respuesta tarda más, ese lapso de tiempo no se extiende más allá de las 48 horas, incluyendo en la gestión la propia entrega del dinero.

A pesar de que todos se conocen como préstamos rápidos o inmediatos, se pueden categorizar en función de la cantidad de dinero solicitada. Así, si esta llega hasta los 1.000 euros se trataría de un microcrédito o minicrédito, mientras que si supera esas cifras, ya sí son préstamos rápidos.

¿Qué ventajas se asocian a esta vía de financiación?

El proceso de solicitud es extremadamente sencillo, pues apenas es necesaria documentación para su aprobación. En algunos casos ni siquiera se requiere una demostración de ingresos recurrentes o aprobar estudios de viabilidad económica.

Por ello son más atractivos que los créditos y préstamos tradicionales que ofrecen las entidades bancarias. En los procesos habituales de financiación la entrega del dinero es mucho más lenta y hay que asegurar un historial crediticio con el que el banco se sienta confiado.

Con estos préstamos rápidos no sucede eso, pues únicamente se solicita el DNI, un extracto del banco para comprobar el número de cuenta en la que entregar el dinero y, solo en algunas circunstancias, una nómina o una pensión.

¿Cuándo es asumible solicitar estos préstamos?

Los pasos a seguir para solicitar financiación a través de esta vía son acudir a la plataforma en cuestión, seleccionar el importe de dinero deseado y el tiempo de evolución y, a partir de ahí, esperar la respuesta de la plataforma, que habitualmente es positiva.

La entrega tan rápida del dinero es lo que atrae a muchos clientes, porque pueden suponer un salvavidas en situaciones de urgencia. Así, cuando hay que enfrentar un pago de manera próxima y no se dispone de suficientes fondos, un préstamo de este tipo es la solución.

En cualquier caso, es muy aconsejable mantener una cierta cautela con el uso de estas herramientas, pues la rápida financiación y la ausencia de requisitos tienen su contrapartida, y es el elevado coste de los intereses.

En este sentido es importante evaluar previamente cuáles son los costes del crédito, con los intereses incluidos, y descartar la opción en el caso de que no haya certeza de poder devolver el dinero a tiempo.

¿Cómo seleccionar el préstamo entre las numerosas opciones disponibles?

Los préstamos rápidos tienen aspectos positivos y otros que hay que valorar muy bien, para no caer en situaciones de endeudamiento. Pero por otra parte, la proliferación de plataformas en internet que han aparecido en los últimos años acaba revertiendo en beneficios para los consumidores.

Son las propias plataformas las que han de captar cuota de mercado y eso lo hacen ofreciendo condiciones más ventajosas a los solicitantes. Desde el punto de vista del usuario, una buena idea para seleccionar cuál es la mejor plataforma disponible es acudir a Loando.es.

Esta empresa actúa como comparador de préstamos online. Su herramienta comparativa ofrece de manera sencilla las posibilidades de préstamos rápidos, las de tarjetas de crédito, líneas de crédito y otras recomendaciones sobre financiación, como por ejemplo los préstamos a plazos.

El gran pero que se le puede poner a los préstamos rápidos es que los intereses son muy elevados. Para solicitudes de financiación de alta cuantía, los intereses se calculan en función del TAE, pero los micropréstamos no funcionan así, sino que el dinero a devolver es la suma de la cantidad prestada más en torno a un 1% diario. De este modo, si se solicita un préstamo de 500 euros y un plazo de devolución de 30 días, llegado ese momento habrá que pagar los 500 iniciales más 150 como intereses.

La competencia entre entidades ha impulsado esas mejoras en las condiciones, de ahí que sea buena idea acudir a empresas como Loando.es para consultar cuál es la mejor opción disponible en cuanto a préstamos rápidos​​​​​​​.

Un paso adelante en digitalización

La aparición de todas estas plataformas está consiguiendo que la mayoría de entidades bancarias avancen hacia la digitalización. Este proceso de transformación digital también es consecuencia de la dependencia actual de internet.

Muchas entidades ya ofrecen a través de sus portales virtuales y apps móviles préstamos y líneas de crédito preconcedidos, que requieren muy poco trabajo burocrático y que se asemeja de algún modo a los préstamos rápidos.

A su vez, a día de hoy es posible prácticamente hacer todo tipo de gestiones financieras a través de internet, sin visitar una sucursal bancaria. La fusión de entidades financieras está provocando también la desaparición de muchas sucursales, un fenómeno que se ve retroalimentado por la presencia de bancos online y fintech.