El coste laboral medio por trabajador y mes ha caído un 8,3% en el segundo trimestre del año hasta los 2.442,91 euros, incluidas las remuneraciones y cotizaciones sociales. El coste por empleado registra así el mayor desplome en 20 años, según las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El organismo justifica este desplome por la crisis del coronavirus y, como consecuencia directa, por la declaración del estado de alarma y las restricciones a la movilidad. Estas medidas suspendieron de forma temporal algunas actividades económicas, especialmente en los meses de abril y mayo.
El INE matiza que los trabajadores acogidos a un ERTE no son remunerados por el salario habitual, sino con prestaciones procedentes directamente del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Sin embargo, algunas empresas optaron por complementar la prestación pública del 70% con el 30% restante para que los trabajadores alcanzarán el total del salario.
Por otro lado, las cotizaciones sociales han estado exoneradas en la mayoría de los casos. Con este fuerte desplome, el coste laboral cambia de tendencia y pone fin a once trimestres consecutivos en positivo.
El coste salarial registra la mayor caída de la serie histórica
En concreto, el coste laboral está compuesto por el coste salarial y otros costes derivados de la actividad laboral. El coste salarial, que incluye todas las remuneraciones en metálico y en especie, registró el mayor desplome interanual de la serie iniciada en el 2000, con una caída del 9,4% hasta los 1.804,8 euros por trabajador y mes. El resto de los costes, no salariales, también registraron un descenso del 5% hasta los 638,83 euros.
El coronavirus no solo tuvo sus efectos sobre el coste laboral, sino que también se modificó la jornada semanal media hasta las 34,4 horas. Según el INE, se perdieron diez horas trabajadas a la semana, de las que 5,2 de ellas no se trabajaron por razones técnicas, económicas, organizativas, de producción y/o de fuerza mayor. Aquí el organismo también incluye el tiempo no trabajado de los afectados por ERTE.
Así, el coste laboral por hora efectiva aumentó un 11,9% en tasa anual en el segundo trimestre por el menor número de horas trabajadas mientras que el coste laboral por hora pagada cayó un 8,6%.
Por comunidades, el coste laboral en Comunidad de Madrid y País Vasco supera los 400 euros la media nacional mientras que en Canarias e Islas Baleares el coste es inferior a la media en la misma cantidad. Aún así, el coste laboral se reduce en todas las comunidades autónomas, con los mayores descensos en Navarra, Murcia y Comunidad de Madrid.
