2020 ha sido un año sin precedentes en todos los aspectos de la sociedad, también en lo que se refiere al consumo. No es ninguna sorpresa que el confinamiento en el mes de marzo por la crisis del coronavirus cambió los hábitos de consumo y las preferencias de compra de los consumidores, que colocaron al papel higiénico como rey de la cesta de la compra.

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Después del boom del papel higiénico, productos como la levadura o artículos para cocinar vivieron un repunte nunca antes conocido, como consecuencia de las restricciones en la hostelería y la restauración, además del mayor tiempo libre que los españoles pasamos en casa.

A pesar de que aún no se puede hacer una radiografía perfecta de la cesta de la compra en 2020, IPG Mediabrands avanza los resultados principales de un año totalmente atípico, también a la hora de hacer la compra.

“El impacto de la pandemia no se ha sentido de igual forma en todas las industrias” -explican desde IPG Mediabrands- “En general, vemos que los productos que han sufrido menores consecuencias en sus ventas son los que menos han descendido la inversión en publicidad”.

Los ganadores de 2020

Entre los sectores de consumo mejor parados de 2020 se encuentran la alimentación, la industria de bienes de consumo, las telecomunicaciones, la sanidad, la educación y la industria farmacéutica y de productos médicos. De hecho, estos dos últimos han ganado una importancia nunca antes vista por la aparición de la pandemia.

Estos sectores, según la compañía, “experimentan una situación más estable con un menor nivel de pérdidas” y prevé para ellos una mejor y más rápida recuperación. Tal y como demuestran los datos del comercio minorista, los gastos en alimentación se han mantenido a lo largo del año e incluso han aumentado durante los meses del confinamiento.

Igualmente, la popularización del teletrabajo, de las clases online y de nuevas formas de relacionarse para cumplir con las restricciones y frenar la curva de contagios han impulsado al sector de las telecomunicaciones, así como la industria de bienes de consumo.

Han sido muchos los españoles que han decidido mejorar sus aparatos electrónicos y electrodomésticos, ya sea para trabajar, para adaptarse al ‘telecole’ o para disfrutar del tiempo libre en casa de una forma más completa. Lo mismo ha ocurrido con los gastos en sanidad y educación, dos sectores clave para la sociedad, especialmente durante una pandemia.

Los perdedores de 2020

En el lado contrario, los sectores peor parados de 2020 son precisamente los más afectados por la pandemia. El ocio, el turismo y el sector transportes han sufrido las consecuencias de la pandemia desde el primer momento de su irrupción en el mes de marzo.

Entre estos productos se encuentran los hoteles, todas las actividades relacionadas con el ocio, el sector Horeca (hostelería, restaurante y cafeterías), los transportes y la automoción. Precisamente la hostelería ha sido uno de los peor parados de 2020 y no prevén una recuperación rápida, a pesar de que el Gobierno ha aprobado hace una semana el plan de rescate para el sector. 

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Además, el sector inmobiliario también se ha visto afectado, con una tendencia clave: el consumidor ha optado por abandonar el centro de las grandes ciudades y ha mostrado su preferencia por inmuebles fuera del núcleo urbano o incluso en zonas rurales. 

Entre estos sectores más afectados, según IPG, se encuentran varios de los “que han reducido su inversión publicitaria por encima de la media (situada en un -27%) como la automoción, la belleza e higiene y el transporte”. También el sector de la belleza, estrechamente relacionado con la moda y el calzado, ha visto caer sus ingresos por la reducción de actividades sociales y las limitaciones al ocio.