A los esfuerzos del Gobierno para evitar la clausura de las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés se suma ahora el Congreso de los Diputados con una declaración conjunta en la que se rechaza la decisión unilateral de la compañía estadounidense de cerrar unas factorías "clave del tejido productivo en Galicia y Asturias".
Con esta declaración, la cámara baja quiere sumar los esfuerzos de las distintas administraciones para que la empresa retire el expediente de extinción de empleo mediante la apertura de una mesa de negociaciones en la que se sienten los representantes de Alcoa y los de sus trabajadores.
De esta forma, se pretende hacer un "frente común" que comience a trabajar en la defensa de los más de 700 trabajadores ante una decisión injustificada. Una "unidad de acción" que firman todos los grupos en el Congreso y que reclamaba la propia ministra de Industria hace una semana.
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