La afiliación a la Seguridad Social ha registrado 464.350 nuevas personas entre enero y julio de 2023, en el acumulado en lo que va de año, el mayor aumento en los siete primeros meses de toda la serie histórica registrada para alcanzar los 20.705.244 trabajadores en julio, descontada la estacionalidad y el efecto calendario propios del verano. El número de afiliados a la Seguridad Social vuelve a rozar, de nuevo, los 21 millones de afiliados en el mes de julio, superando por segundo mes consecutivo la barrera de las 20,9 millones de personas en niveles de afiliación diaria. Los datos revelados este miércoles por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se acercan al resultado de la EPA publicada por el INE de forma independiente hace apenas una semana, que constataba ya haber superado los 21 millones de ocupados en el segundo trimestre del año, antes del arranque del verano. 

La cifra de afiliación media de la Seguridad Social queda en el mes de julio en los 20.891.885 ocupados, un nuevo máximo histórico que le deja a las puertas de alcanzar los 21 millones de ocupados reflejados en la EPA del segundo trimestre. La diferencia entre unos datos y otros, tal y como explicó el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, es que las cifras de afiliación actualizadas por el departamento de Seguridad Social son datos registrados, mientras que las cifras de la EPA corresponden, como su propio nombre indica, a una encuesta independiente del INE. 

La mejora de los niveles de afiliación a la Seguridad Social en lo que va de año suponen el mayor ritmo de crecimiento en un periodo como este de toda la serie histórica, con la excepción de 2005, condicionado por el proceso extraordinario de regularización. Además, se trata de una cifra de creación de empleo similar a la de todo 2022. Es decir, los más de 460.000 afiliados a la Seguridad Social acumulados hasta el mes de julio se acercan ya a la mejora de la afiliación anual del ejercicio anterior, un año que el propio Gobierno califica de "gran dinamismo en el mercado laboral".

La afiliación media alcanza los 20,89 millones de ocupados en julio tras sumar 21.945 ocupados más frente a junio, con un incremento intermensual del 0,11%. En comparación interanual, el crecimiento de la afiliación se ha acelerado una décima, al 2,71%, con 550.921 afiliados más que hace un año. En el periodo acumulado hasta julio de 2023, la afiliación media ha crecido en 595.614 personas, la segunda mejor cifra en 16 años, solo superada por los datos de 2017. Por su parte, la tasa interanual de crecimiento del empleo se acelera al 2,7% en el mes de julio, una décima más que el mes anterior. 

La afiliación a la Seguridad Social mejora los niveles prepandemia

En el acumulado, la afiliación a la Seguridad Social ha superado ya todos los niveles prepandemia y, según los datos de Seguridad Social, se han creado ya alrededor de 1,3 millones de empleos, con "especial dinamismo" en sectores de empleo considerados de alto valor añadido como son la informática y las telecomunicaciones, con un 23,7% más, y las actividades científicas, con una mejora de la afiliación del 14%. Según los datos conocidos este miércoles, el 75% de los nuevos puestos de empleo corresponden al sector privado. 

Asimismo, el número de jóvenes afiliados a la Seguridad Social ha crecido tres veces más que la media desde la entrada en vigor de la reforma laboral en enero de 2022, un 16,3% frente al 5,4% de media, así como un 10,3% más frente a los niveles previos a la pandemia, tres puntos porcentuales por encima de la media del mercado de trabajo en general. Una mejora que también queda patente en los niveles de empleo femenino, donde las afiliadas han aumentado un 8,6% en lo que va de año, un 3% más que los hombres. 

Los datos del Ministerio de Trabajo y del Ministerio de Seguridad Social, así como la EPA del segundo trimestre, dejan patente el cambio de tendencia en el mercado laboral y la solución a uno de los problemas estructurales: la temporalidad y el empleo de baja calidad. Así, tras la entrada en vigor de la reforma laboral en enero de 2022, se constatan "con claridad" sus efectos positivos en la estabilización del empleo y la mejora de la calidad.

Tres millones más de indefinidos por la reforma laboral

El porcentaje de afiliados con contrato temporal en el mes de julio se sitúa en el 15%, la mitad del que se registraba antes de la reforma. En el caso de los menores de 30 años, la reducción de la tasa de temporalidad es aún más intensa, en base a los datos oficiales de Seguridad Social, bajando en 28 puntos porcentuales, del 53% al 25%, frente a los niveles prereforma laboral. En total, a día de hoy hay casi 3 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021.

Además, el aumento de la duración media de los contratos que han causado baja deja también patente la mejora de la estabilidad en el mercado de trabajo nacional. Entre enero y julio de este año, el porcentaje ha crecido un 33% en comparación con las cifras del mismo periodo de 2019, el último año homologable previo a la pandemia, mejorando también los datos de 2022. Estrechamente relacionado con la pandemia, el informe de la Seguridad Social revela también que el número de trabajadores en ERTE se encuentra ya en mínimos, alrededor de los 12.000 afiliados, representando apenas un 0,1% del total de afiliados al sistema de la Seguridad Social. 

Por otro lado, las cotizaciones sociales crecen un 10% interanual, en el 8,2% si se excluye el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) del cálculo -empezado a aplicar en enero de este año-, como consecuencia de la probada mejoría en la cantidad y calidad del empleo y de la recuperación salarial de los trabajadores. También la mejoría del empleo tras la reforma laboral impulsa la ratio cotizante por pensionista, en 2,4, en máximos de la década, según los datos del Ministerio de José Luis Escrivá. Y es que el dinamismo del mercado de trabajo y la mejora de la calidad del empleo tienen también su impacto positivo en la sostenibilidad del sistema de pensiones, mejorando las cotizaciones para asegurar las pensiones de jubilación presentes y futuras.