El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha presentado este martes el sistema estatal de índices de referencia de precios de alquiler como un primer paso para controlar los precios en las zonas tensionadas, especialmente en el centro de las grandes ciudades como Madrid o Barcelona.

El Ministerio ha estudiado más de 11 millones de arrendamientos para elaborar el índice, incluyendo datos referidos a rentas, metros cuadrados y superficie en todos los niveles territoriales.

Ábalos ya se comprometió a hacerlo hace más de un año, momento en que se aprobó el decreto del alquiler y estaba previsto publicarlo en marzo, decisión que se aplazó por la pandemia del coronavirus. De hecho, la crisis del coronavirus ha provocado la paralización de los pisos turísticos en el centro de las grandes ciudades, disparando la oferta del mercado de alquiler.

El ministro ha destacado en su presentación que el índice de precios ayudará a “acertar en la toma de decisiones, y será útil para aplicar políticas fiscales o de otra índole, que incrementen la oferta de vivienda en alquiler y de este modo reducir los precios".

La medida entrará en vigor a finales de año

Este índice servirá para que los Ayuntamientos puedan identificar las zonas más tensionadas y, en consecuencia, tomar las decisiones correspondientes para solventar el problema. Sin embargo, no se espera que los consistorios puedan hacerlo hasta finales de año.

Las reacciones al anuncio del Ábalos son diferentes según el sector ya que, por un lado, los inquilinos celebran la medida mientras la Comunidad de Madrid cree que es el primer paso para poner un tope en el precio del alquiler.

El consejero de Vivienda, David Pérez, ya ha alertado en Onda Madrid que la medida ha sido un fracaso en otros países de Europa: "Lo que ha ocurrido en estos países es que la gente ha retirado sus viviendas del alquiler porque ya no les interesaba. Conclusión: se ha reducido la oferta, han aumentado los precios y el fraude".