La propagación de coronavirus y sus variantes, como la Delta, han modificado nuestros hábitos de vida y consumo, sin embargo, no son el único factor a tener en cuenta en los cambios de nuestra rutina. La sucesivas crisis económicas que ha atravesado y atraviesa nuestro país, impactan sobre las dinámicas de empleo así como la empleabilidad, especialmente entre los más jóvenes. De hecho, el 41% de los profesionales de entre 16 y 24 años pretende cambiar de empleo en los próximos 6 meses, según los datos del Informe de Infojobs sobre la 'Intención de Cambio de Empleo'.

Las razones se basan sobre todo en encontrar proyectos más motivantes o cambiar radicalmente de rumbo laboral. Además, respecto a este porcentaje se percibe que las mujeres manifiestan mayor intención de cambio. En este caso, el 37% de las mujeres afirma querer tener un nuevo empleo a corto plazo, mientras que entre los hombres esta cifra cae al 29,5%.

Cambio de rumbo

El porcentaje de profesionales que tenía previsto buscar un nuevo trabajo el pasado año cayó se situó en el 20%, sin duda un dato al que colaboró la crisis sanitaria que aún padecemos; mientras que el dato de 2021 se sitúa en el 15% de profesionales. Algunos de los motivos que pueden influenciar en este porcentaje son, por ejemplo, la incertidumbre laboral o la situación de ERTE bajo la que se encuentran casi 300.0000 ciudadanos.

No obstante, son los jóvenes los más propensos al cambio de trabajo. Además, según va creciendo la edad de la población activa cobran peso otros puntos para realizar el cambio como la existencia de mejores condiciones para conciliar la vida familiar y profesional o el tener un trabajo con menor nivel de estrés.

En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció en mayo de 2019 la enfermedad burnout o desgaste profesional, -un trastorno emocional vinculado al ámbito laboral que aparece como consecuencia de una situación de estrés laboral crónico, fruto de la incapacidad para desconectar del trabajo, lo que repercute negativamente en la salud física y mental- como enfermedad. Precisamente, según revela un estudio de la aseguradora Cignala pandemia ha incrementado el porcentaje de profesionales que padecen la enfermedad de burnout a la que han colaborado la situación de incertidumbre y los cambios en el entorno laboral. El 45% de los españoles reconoce sufrir estrés laboral, siendo la monotonía uno de los catalizadores de esta sensación. 

Según el informe de Infojobs, en general, las principales motivaciones que impulsan a los trabajadores españoles a plantearse un cambio de empleo son: tener un salario más elevado (74%), un mejor horario (45%) y encontrar mejores condiciones para conciliar la vida laboral y familiar (44%). Respecto al porcentaje que hace referencia al nivel salarial, merece la pena mencionar que el I Barómetro del Empleo de InfoJobs reveló que en la actualidad al 74% de la población activa española le preocupa que los salarios no sean acordes a la formación y experiencia requerida para un puesto. De hecho, se trata de la primera de sus preocupaciones en materia de empleo.

Por otro lado, un factor que afecta especialmente desde el pasado año al planteamiento de cambio se empleo es la posibilidad de teletrabajar, algo que, para el 24% de los encuestados es primordial. Por el contrario pierde peso la localización del lugar de trabajo que desciende del 37% al 28% entre 2020 y 2021.

La adopción de un modelo híbrido

Precisamente la adopción de un modelo híbrido de empleo, es decir, aquel que combina el trabajo presencial y el teletrabajo parece ser la mejor opción para trabajadores y empresas ya que permite promover la conciliación laboral con las obligaciones laborales y, sin lugar a dudas, es el que mejor se adapta al nivel emocional de los empleados.

Por otra parte, en cuanto a las motivaciones para cambiar de empleo, precisamente el teletrabajo se ubica como punto de inflexión. Para los no teletrabajadores, lo primordial es conseguir un buen horario o flexibilidad horaria que permita conciliar la vida laboral y la vida familiar mientras que para los teletrabajadores, este tema no tiene tanta importancia (41%), y persiguen otros objetivos como son la motivación (41%) y ampliación de competencias en un nuevo trabajo (40%).