El consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez, ha asegurado este miércoles que la inestabilidad que sufren estos días los mercados es “coyuntural” y no tiene nada que ver con la de 2011, que era “estructural”, con las economías europeas sumidas en una recesión.

Durante un coloquio sobre el sector financiero organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección y Axis Corporate, Álvarez se ha referido a las turbulencias bursátiles y el repunte de las primas de riesgo europeas, debidas en parte a las dificultades para formar Gobierno en Italia y a la situación política que vive España, entre otras razones.

La situación actual no tiene “nada que ver” con la de 2011, cuando las economías estaban en recesión y había otros problemas, ya que ahora, “incluso en Italia la economía crece”, por lo que Álvarez ha insistido en que no ve “problemas estructurales sino coyunturales”.

Para el consejero delegado, a pesar de que “el euro aún está en construcción” y a la unión bancaria le falta, por ejemplo, disponer de un Fondo común de Garantía de Depósitos, está claro que “es el camino a transitar”.

“Hace años, el ritmo político se circunscribía a los países emergentes”, pero ahora el riesgo político también surge en democracias maduras, en ocasiones “hay candidatos con propuestas no ortodoxas”.

“En estos días se habla del resurgimiento del fantasma de 2011, pero no tiene nada que ver”, ha explicado, aunque ha admitido que “los mercados se ponen nerviosos”.

Preguntado sobre las consecuencias que tendrá la salida de Reino Unido de la Unión Europea, el “brexit”, para la economía de ese país, uno de los principales mercados del Santander, Álvarez ha admitido que la economía británica “está perdiendo dinamismo porque el marco aún no está bien definido”.

“El brexit no ha sido una buena idea, pero está ahí” y añadirá “dosis de incertidumbre” que afectarán a las inversiones y al crecimiento económico del país, que ya ha sido más bajo que la media europea en el primer trimestre del año.

Sin embargo, explicó, la situación se puede recuperar cuando el entorno sea más estable, aunque de momento, “hay operadores que tienen que tomar decisiones” y se está perdiendo impulso.

En cuanto a cómo influirá el “brexit” en el negocio británico del Santander, explicó que dependerá de cómo afecte a la economía del país.