El líder de la trama Gürtel, Francisco Correa, ha cambiado de idea y ha decidido que declará hoy en el juicio que celebra la Audiencia Nacional por la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia de 2016 tras escuchar las declaraciones de los 13 acusados que han alcanzado un acuerdo de conformidad con la Fiscalía Anticorrupción.

"Mi intención era no declarar pero este tribunal me invita a declarar", ha dicho Correa cuando el presidente del tribunal, el magistrado José Antonio Mora Alarcón, le ha llamado para que se sentara en la silla reservada para las declaraciones de los acusados.

La defensa del 'cabecilla' de la Gürtel ha mostrado en todo momento su oposición a que el orden de los interrogatorios se alteraran, tal y como ha solicitado el Ministerio Público, para que primero comparecieran los acusados que han reconocido los hechos a cambio de una rebaja en las peticiones de pena. Para tratar de convencer al tribunal, anunció que su defendido, Francisco Correa, se acogería a su derecho a declarar, por lo que el hecho de que los acusados que han pactado con la Fiscalía pasaran antes o después que éste no afectaría a su intención de mantener el silencio.

Así, la defensa mantenía la misma estrategia que ha seguido en los últimos juicios del caso Gürtel. La última vez que se escuchó a Correa fue en enero de 2018, en la vista oral sobre la financiación irregular del PP valenciano en una intención de colaborar con la Justicia para lograr una rebaja de su pena. Si bien, unos meses más tarde, en diciembre de ese mismo año, en el juicio por los amaños de contratos de Aena mostró una posición totalmente contraria.

Alrededor de las 17.30 de ayer Correa manifestaba que había cambiado de opinión y quería declarar en el juicio por la organización de la visita del Papa a Valencia en 2006, en la que se enfrenta a 38 años de prisión y tres meses de prisión. Según ha explicado, su comparecencia irá encaminada a "dejar claro que no se ha pretendido cobrar nada de más", por lo que ha sugerido al tribunal que le deje "explayarse" en su turno en la última palabra.

Evitar traslados desde la prisión

Su intención era declarar este martes para evitar tener que ser trasladado de nuevo desde la prisión hasta la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares (Madrid) y ha recordado que para ello tiene que levantarse a las "cinco de la mañana, sin duchar". El tribunal ha eximido a todos los acusados que lo han solicitado que asistan al resto de sesiones de juicios hasta que tengan que hacer uso de su turno de última palabra.

Sin embargo, y tras la insistencia del presidente del tribunal, Correa ha aceptado comenzar a ser interrogado hoy: "Yo tengo muchísimas ganas de oírle y usted muchísimas ganas de hablar al tribunal. Haga un último esfuerzo y venga usted mañana", decía el presidente del tribunal al 'cabecilla' de la Gürtel.

Quien sí se ha mantenido en su intención inicial ha sido el 'número dos' de la trama Gürtel, Pablo Crespo, que ha confirmado que se acogía a su derecho a no declarar, por lo que no será trasladado desde el centro penitenciario hasta la Audiencia Nacional. Tampoco lo hará el responsable de Orange Market, empresa de Correa en Valencia, Álvaro Pérez 'El Bigotes', que prestaba ayer declaración.