FACUA ha pedido al Ministerio de Consumo que se regulen las cajas de botín de los videojuegos para prohibir el acceso de los menores de edad a este tipo de servicios y establecer sanciones contra las empresas del sector que no lo prohíban.

Consumo lanzó una consulta pública sobre la necesidad de gravar y exigir una licencia a las empresas que ofrezcan las cajas de botín o 'lootboxes',  pero FACUA denuncia que no se han realizado acciones desde que el director general de Ordenación del Juego, Mikel Arana, anunciara en noviembre una modificación normativa para considerar las cajas de botín como juegos de azar.

Otros países han actuado

Las 'loot boxes' son 'ítems' de recompensa que los jugadores reciben a través de micropagos, con nuevos recursos, zonas, tesoros, habilidades, personajes o variantes estéticas de manera aleatoria, sin que el jugador sepa previamente qué va a recibir.

Algunos países europeos y Estados Unidos ya han iniciado procesos de investigación e, incluso, han tomado medidas sobre este tipo de recompensas por su componente de aleatoriedad, que interpretan como similar al de los juegos de azar.

Garzón anunció medidas

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, apuntó en diciembre de 2020 que su intención era realizar una prohibición técnica para proteger a los menores del acceso a las 'loot boxes'.

En un comunicado, FACUA que se "luche contra el aumento de la ludopatía entre los jóvenes" a través de la prohibición de su acceso, "al igual que se les impide el acceso a casas de apuestas o juegos de azar".

La asociación reclama el establecimiento de medidas sancionadoras contras las empresas que las mantengan, así como que se aumente la celeridad de las medidas anunciadas por Arana.

La asociación denuncia que "muchos videojuegos gratuitos han convertido estas microtransacciones en su principal vía de financiación" y que ello supone que "los menores estén gastando dinero de forma constante sin ningún tipo de límite, control o conocimiento de sus tutores".