Pablo Motos recibió al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, en El Hormiguero y la noticia fue el reproche del líder cántabro al presentador.

Como viene siendo habitual, Motos suele realizar un monólogo poco después de comenzar el programa y en él ha vuelto a cargar contra el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, por su trabajo en la gestión de la crisis del coronavirus.

El presentador reprochó hace unos días que “si Fernando Simón no recomendaba el uso de mascarillas, no estaba atendiendo a criterios sanitarios, sino a políticos”.

Una referencia crítica con la que otorga culpa al director del CCAES por el aumento de los contagiados y fallecidos desde el mes de marzo.

Lo cierto es que la Organización Mundial de Salud, y no Fernando Simón, fue la que lanzó una recomendación, en febrero, a todos los países, asegurando que el uso de las mascarillas no era obligatorio y que principalmente solamente debían llevarlas personas contagiadas.

Tras estas críticas al director del CCAES, Miguel Ángel Revilla salió en defensa suya en el programa. “Ante lo que ninguna persona conoce, ¿quién está preparado?”, señaló.

El presidente de Cantabria tuvo que hacer frente a las críticas vertidas por Pablo Motos. Algunas de ellas señalaban que, ante la falta de mascarillas, deberían haber recomendado hacerlas en casa. “Lo único que hace falta es usar el sentido común”, apunto el presentador de El Hormiguero.

Revilla explicó al comunicador que “a toro pasado es muy fácil realizar críticas”. Pero, en defensa suya, el líder cántabro aseguró que “este hombre ha soportado todos los días tres horas de preguntas con talante. 100 preguntas al día, sin insultar a nadie”.

“Hay que ponerse en su papel. No le conozco, pero si le veo le doy un abrazo”, puntualizó el presidente de Cantabria.

El presentador trató de insistir lanzando dardos contra el Gobierno, razonando que es cierto que “algunos golpes encajados por Simón no eran suyos”.

Un capítulo más de Pablo Motos desprestigiando la labor realizada durante tres meses, sin un día de descanso, por el director del CCAES, Fernando Simón.