Como contaba ayer ELPLURAL.COM, el desdén que José Antonio Monago ha mostrado ante la moción de censura que afronta hoy en el Parlamento extremeño contrasta con el extraordinario exfuerzo que ha hecho por controlar su impacto mediático, lo que ha incluido desde la pertinente ronda por los medios de PRISA hasta extraños sondeos 'ad hoc' para deslegitimar la iniciativa socialista. Pero la estrategia se le ha ido de las manos en uno de sus aspectos más burdos: silenciar el debate.

Todo antes que la moción de censura
Como están denunciando los propios trabajadores de la pública Canal Extremadura, la dirección de la cadena ha preferido retransmitir magacines enlatados del día anterior, telenovelas o espacios de cocina antes que la segunda moción de censura que se produce en la región en 30 años de autonomía.

Los trabajadores de la televisión pública extremeña se han plantado ante lo que consideran una falta de respeto al derecho a la información de los ciudadanos y han desplegado una batería de acciones. Llevan desde ayer recogiendo firmas contra la decisión en change.org, se han concentrado ante la sede de la televisión y están denunciando activamente desde las redes sociales que "no es lo mismo moción de censura que censurar la moción".


 

El 'Buruaga extremeño' vuelve a perder los nervios
Ante una de las imágenes de las protestas por los trabajadores en Twitter ha irrumpido también a través de la red social un periodista de la COPE, José Manuel Gordillo, para acusarles, acusándoles de estar "a sueldo" y "hacer ruido". Este Gordillo es el conocido como 'Buruaga extremeño' por su radical seguidismo al PP, su afición a la buena mesa y su tendencia a criticar a quiénes protestan, de hecho llamó "gentuza" a los miembros del 'Campamento Dignidad' que interrumpieron la grabación del informativo autonómico de TVE.