Estuvo tres años alejada de las cámaras de televisión, sin ningún programa en ninguna cadena. Sin embargo, Mariló Montero regresó a la pequeña pantalla hace cuatro meses y lo hizo en Canal Sur, después de que concluyera la excedencia que solicitó en 2009. Además, el lunes volvió a pisar un nuevo charco con Risto mientras su espacio en la tele andaluza se desangra.

5. C El Debate es el espacio que dirige la periodista y expareja de Carlos Herrera. Montero, antes de iniciar esta andadura, señaló que Pablo Iglesias “no está capacitado para liderar ningún partido”. Una polémica a la que se le suma su aparición en el programa que conduce Risto Mejide en Cuatro, Todo es mentira.

A las preguntas de Mejide, Montero ha criticado que Pablo Iglesias, vicepresidente de Derechos Sociales y Agenda 2030, y Alberto Garzón, ministro de Consumo, hayan llevado un pin en homenaje a las víctimas de los campos de exterminio nazis en la solapa de sus americanas durante el acto de acatamiento de la Constitución que ha tenido lugar este lunes en el Palacio de la Zarzuela.

Para la presentadora, esto deja claro que Unidas Podemos es un partido de extrema izquierda: “Resulta que este hombre ha jurado con un triángulo antifascista en la solapa. Risto, habéis hecho un vídeo con los de Vox haciendo la alegoría de que vuelve la Reconquista. A ver si hacemos un vídeo de ese pin que llevaban los que estaban en un campo de concentración. No es para bromear. Además de comprarse una chaqueta nueva, Iglesias y Garzón han llevado ese pin”, ha explicado, ante la atenta mirada de Mejide.

Audiencia calamitosa

A pesar de que ha regresado al escenario nacional con esta entrevista con Risto Mejide, Mariló Montero es noticia en Andalucía por la escasa audiencia que fideliza su programa de debate en la televisión pública. De hecho, en su estreno, 5. C El Debate tan sólo promedió un 2% de cuota, 5 puntos por debajo de la media habitual de la cadena.

Esto se traduce en un raquítico dato de espectadores, superando escasamente los 50.000. Con el tiempo, el programa no mejoraba sus datos y aumentaba un 0.5% de share y unos 68.000 telespectadores. Unos números que no consigue impulsar, pues su último programa apenas superó los 2,6 puntos de cuota de pantalla.