Este lunes han jurado sus respectivos cargos en el Gobierno de Pedro Sánchez tanto Pablo Iglesias como Alberto Garzón; el primero en calidad de vicepresidente segundo de Derechos Sociales y Agenda 2030 y el segundo como ministro de Consumo. Ambos son comunistas declarados y durante la jura han tenido que asumir su puesto declarando su “lealtad al rey”.

Ambos lo han hecho, como el resto de ministros, y también han saludo al monarca. Eso sí, también han conseguido colar discretos símbolos comunistas.

Se trata de un triángulo rojo invertido que tanto el secretario general de Podemos como el coordinador federal de Izquierda Unida llevaban en la solapa de sus trajes (por cierto, ha sido llamativo también ver a Iglesias ataviado íntegramente con un traje).

Este símbolo era utilizado por los nazis para marcar e identificar a los presos políticos en los campos de concentración. Con el tiempo se ha convertido en todo un símbolo perfectamente reconocible de la lucha antifascista.

Alberto Garzón acostumbra a llevarlo, pero en esta ocasión no ha estado solo. Iglesias le ha acompañado, incorporando el triángulo rojo por primera vez a su vestimenta.

Y no ha sido la única novedad. Cabe destacar también que Iglesias se ha ataviado con un traje íntegro, no únicamente con americana. Eso sí, junto a Garzón han sido los dos únicos que no llevaban corbata durante el acto de juramentos.