“Pésimos servicio. Pelos en las gambas y cubiertos con costras de comida de clientes anteriores. Pasa de largo”. Esta es la reseña que este martes escribía la cofundadora de Vox, Cristina Seguí, después de una supuesta visita a un restaurante chino ubicado en Valencia.

Sin embargo, tal y como quedaba claro después por la respuesta del establecimiento, lo cierto es que Seguí no llegó ni siquiera a entrar al restaurante porque no mostró el pasaporte COVID cuando se lo pidieron. “No acostumbramos a responder a los comentarios, pero en esta ocasión lo haremos por tus mentiras, porque te hemos pedido el pasaporte COVID y por tu negación, no podemos permitirlo”, subrayaba el establecimiento.

Asimismo, el restaurante elevaba el tono y amenaza directamente con denunciar a Seguí y a su acólito si no rectificaban: “Debido a ello, te invitamos a quitar dicho comentario a ti y el de tus amigos o deberemos presentar acciones legales”.

No obstante, Seguí, fiel a su estilo de siempre buscar la confrontación, lejos de rectificar, señalaba directamente al restaurante y les acusaba de “discriminar” y “negar ilegalmente la entrada a las personas que no tengan pasaporte COVID” -hay que recordar que el certificado de vacunación está vigente en la Comunidad Valenciana desde el pasado fin de semana.

Por último, la cofundadora de la formación ultra continuaba con sus ataques y advertía de que a partir de ahora denunciaría a través de las redes sociales a todos los establecimientos que obliguen a mostrar el pasaporte COVID: “Desde ahora, todos los colaboradores en el señalamiento, la segregación, y la marginación de una parte de la sociedad para crear parias aplicando normas ilegales e inconstitucionales, serán señalados en este perfil. Me da igual si es Margarita Robles o un bar”.