Cuando esta nochevieja se le acerque su cuñado con ojos encendidos y un beso a flor de labios; cuando la tía Josefa le vuelva a pinchar en la mejilla con ese bigote del que siempre queda un resto; cuando sus hermanos dejen de discutir durante tres minutos sobre si ha salido mejor el besugo o la pepitoria para abrazarse como no volverán a hacerlo hasta justo trescientos sesenta y cinco días más tarde; piense que es usted un afortunado.

Lo dice el estudio sociológico llevado a cabo por Metroscopia para Coca-Cola y que ha servido de base para la nueva campaña de la marca que se estrena esta misma noche en televisión. Por cierto, cuando esté en plena vorágine de exaltación de la amistad tras las campanadas, eche un vistazo a cualquier canal de Atresmedia o de Mediaset, [spoiler alert] porque también va a ser el primer anuncio del año.

Según los autores del estudio, realizado en base a las respuestas de dos mil adultos durante este mismo mes de noviembre, los españoles “somos cariñosos, sociables y hospitalarios”. Un 67 por ciento de los encuestados afirmó no tener problema para entablar conversación con alguien que no conocen, un 91 por ciento compartir mesa con desconocidos y uno de cada dos asegura reunirse con familiares con los que no convive al menos una vez a la semana.

Y, para que vean ustedes que es verdad que somos afortunados de ser como somos, un 94 por ciento afirma disfrutar más en compañía y un 85 por ciento recibir algún beso o abrazo a diario.

Así que, ya sabe. Esta navidad, más besos, más abrazos, arrímese, que hasta Sergio Dalma sabe que bailar de lejos no es bailar. Eso sí, por mucho cava [o Coca-Cola] que beba, no se le ocurra besar a ningún oriental que tenga cerca, por muy desconocido que sea, que eso es cosa nuestra.