Con motivo de su última canción, el crac universal, Coque Malla se ha pasado este sábado por ‘laSexta Noche’ y el cantante se ha vuelto a posicionar en contra del ingreso en prisión de Pablo Hasel. “Mi compromiso con la libertad de expresión es total. Soy consciente de que tiene un precio, y hay que pagarlo para que la libertad de expresión no tenga límites. Yo estoy dispuesto a pagarlo”, ha subrayado Malla. Un precio en el que el cantante ha señalado que está “aceptar discursos de odio, situaciones que no nos gustan oír…”, entre otras cosas.

“Yo escucho cosas que no me gusta oír. En mis redes sociales recibo insultos continuamente, pero no quiero que metan a nadie en la cárcel por eso”, ha destacado. Por ello, ha reclamado que “el beneficio que tiene que la libertad de expresión no tenga límites es mayor que el prejuicio”.

“Me sale decirlo de una maneara totalmente visceral y emocional: nadie debería acabar en la cárcel por decir cosas”, ha manifestado de manera tajante Malla. “Otra cosa son sanciones, restricciones en tu trabajo…”, ha añadido, incidiendo de nuevo en que “en el ámbito del arte la libertad de expresión no puede tener límites".

"Es posible que acabemos de nuevo en el bipartidismo"

Por otra parte, Malla también ha dado su opinión sobre la actualidad política del país. En este sentido, preguntado por Verónica Sanz sobre si vuelve el bipartidismo, el cantante ha indicado que “España es un país dividido en dos históricamente”. “Desgraciadamente, es una pena que tanto poder esté siempre en manos de unos pocos, el bipartidismo representa un poco eso”, ha añadido.

Según Malla, es “posible que acabemos de nuevo en el bipartidismo”, puesto que “el debate político se ha emponzoñado”. “Qué pena, porque sería maravilloso e interesante un parlamento vivo y lleno de debate, de lucha, por el poder”, ha lamentado.

Por último, Malla ha resumido a través de dos canciones cómo ha afectado la pandemia de coronavirus a su música: “’Calma’ describía el paisaje y la sensación que creo que todos teníamos dentro; una calma inquietante, porque salíamos a la calle y estaban desiertas; una calma muy poco deseable. ‘El crac universal’ es una fantasía que escribí sobre lo que me gustaría que en algún momento llegue”.

Una luz al final del túnel que Malla espera que sea “una explosión de libertad y de placer, una especie de nuevos años 60... o nuevos años 20”. “Va a ser todo tan paulatino que no sé si va a haber ese momento de 'ya somos libres'. La libertad va a ir llegando poco a poco”, ha sentenciado.