El pasado 14 de julio, Gemma Nierga se dirigía a los oyentes de la SER para despedirse después de 30 años en la radio de Prisa. Lo hacía ligeramente emocionada y haciendo uso de la ironía: "Por mi parte, sepan que les voy a echar mucho de menos. Echaré de menos nuestra relación. No voy a poner ninguna distancia entre ustedes y yo. Después de muchos años trabajando en esta empresa, hoy dejo la cadena SER. No por decisión mía, eso ya lo saben; sino por decisión de quienes dirigen la emisora, que son quienes saben gestionar el medio y quienes entienden de radio".

Una despedida elegante y con sentimiento, que fue ampliamente aplaudida por la profesión y que ahora intenta empañar el polémico periodista Federico Jiménez Losantos. Y es que en su último artículo de opinión publicado en ‘Libertad Digital’, Losantos se dirige a Nierga como “la filósofa de la SER recién despedida”, pidiendo además con sorna que sea “readmitida” en la radio de Prisa.

Resulta curioso que Losantos se dirija en estos términos hacía una profesional que durante 30 años de forma ininterrumpida ha trabajado -cosechando además importantes éxitos profesionales-, para la misma empresa de comunicación.

Polémica por los despidos como empleado y empresario

 

 

Cabe recordar que Losantos se vio obligado a fundar ‘EsRadio’ tras su abrupta salida de la cadena COPE. Fue en 2009 cuando la cadena de los obispos le despidió. Una decisión motivada en base al sinfín de polémicas en las que Losantos  se vio envuelto a raíz de los comentarios humillantes e insultos que vertía en su programa y que le valieron numerosas denuncias (y posterior condenas judiciales) de personajes como Alberto Ruiz-Gallardón o José Antonio Zarzalejos. Antes de la COPE, Jiménez Losantos también fue despedido de Antena 3 tras lanzar un jaque a los nuevos propietarios que habían llegado a la empresa.

 

 

Polémicas sobre despidos que Losantos no sólo ha protagonizado como empleado, sino también como empresario. Sin ir más lejos, tras su abrupta salida de Es Radio en 2013, César Vidal, optó por ajustar cuentas con sus antiguos compañeros de emisora. Lo hizo destapando las “purgas” y la “censura” que a su entender existe en la empresa de Losantos.  

“En apenas unas horas, mis colaboradores fueron despedidos sin tener en cuenta ni su valor ni sus méritos ni los servicios rendidos a la casa. Mi equipo fue descuartizado y a aquellos a los que se consideró que podían tener más relación conmigo se les puso directamente en la calle (…) Y por si todo lo anterior fuera poco, uno de los personajes que más estaba contribuyendo a llevar a Es Radio a la ruina arrancó en un acceso de furia mi retrato de una de las paredes y lo lanzó contra el suelo”, afirmó en su día César Vidal.