La presión de los hosteleros malagueños contra el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, no cesa pese a la relajación de las medidas en Andalucía por el coronavirus. Muchos de ellos reclaman en sus establecimientos a través de llamativos carteles “una Isabel Díaz Ayuso en Andalucía”. Mensaje especialmente llamativo teniendo en cuenta que Moreno Bonilla es malagueño y que hasta la fecha, los autónomos que se dedican a la hostelería eran mayoritariamente afines al Partido Popular.
“Queremos una Isabel Díaz Ayuso en Andalucía. Alguien que nos defienda de los ataques injustos que sufrimos. Estamos cansados, hartos. ¡Indignados!”, rezan los carteles que se exhiben en locales como el Tita Conchi en la céntrica Plaza Mitjana. Este establecimiento cerró sus puertas tras las medidas de restricción adoptadas por el Gobierno andaluz y las numerosas multas que la Policía Local de Málaga les interpuso cada fin de semana.
Los hosteleros se quejan de la presión que ejerce sobre sus locales la Policía Local, incapaz de impedir que cuando los locales echan el cierre, la fiesta se traslade a la calle. Por todo ello exhiben carteles que bajo el lema “No cierro, me cierran”, sirven para reclamar a la Junta de Andalucía que adopte el llamado 'modelo Ayuso', en referencia al marco legislativo vigente en la Comunidad de Madrid, menos restrictivo para la hostelería.
Inicialmente, la campaña fue ideada por la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) el pasado mes de febrero cuando tuvieron que estar varias semanas con las persianas bajadas a raíz de los malos datos de la incidencia de coronavirus que presentaba la ciudad de la Costa del Sol. Sin embargo, muchos de estos carteles han reaparecido con intensidad, por ejemplo en el genuino barrio de Pedregalejo, ante las restricciones de horarios y de movilidad (no se permitirá a los andaluces de otras provincias entrar a Málaga en Semana Santa) que sigue decretando la Junta de Andalucía.
Este es el texto íntegro de campaña iniciada en febrero por los hosteleros malagueños: “No podemos aguantar más. Estamos abandonados por el Gobierno de España, tras casi un año de pandemia y cero ayudas a la hostelería. Hemos sido maltratados, abandonados y culpables de todo. ¡Necesitamos trabajar! Queremos una Isabel Díaz Ayuso en Andalucía. Alguien que nos defienda de los ataques injustos que sufrimos. Estamos cansados, hartos. ¡Indignados! Gracias por enviarme a mí, a mis trabajadores y a mi familia a la calle. Gracias por nada”.
