La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha criticado que se "politice" la grave situación por la que están pasando muchas de las residencias de la región al tiempo que ha vuelto a señalar a los médicos y sanitarios madrileños por lo que califica de "huelga política" en defensa de la sanidad pública. Una contradicción en la que ha ahondado tras asegurar que su Administración "no deja a nadie descolgado" pero ha vuelto a poner el foco a los profesionales de la Atención Primaria por su pretensión -dice- de "alargar" los paros.
Residencias y médicos
Este miércoles, la presidenta regional se ha trasladado hasta el Ayuntamiento del municipio madrileño de Alcalá de Henares para celebrar de forma excepcional la reunión del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid. Una ubicación que, aunque parece ser en una localidad más de la región, no es baladí ya que se encuentra actualmente en manos del PSOE y en el punto de mira del Partido Popular de cara a la carrera hacia las elecciones municipales del próximo 28 de mayo.
Una cita que ha provocado la reacción de decenas de habitantes de esta ciudad, quienes se han organizado para protestar contra la falta de médicos en las urgencias extrahospitalarias del centro Luis Vives y los problemas causados por la Línea 7B de Metro en San Fernando de Henares así como para reclamar "soluciones" por las "penosas" condiciones de una residencia pública de la localidad. Concretamente la Francisco de Vitoria, que es objeto de críticas por parte de afectados y vecinos.
Esta última es una petición que también le ha trasladado el alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, tras destacar la grave situación por la que están pasando los residentes y exigir una "solución técnica" a los problemas. Y es que las principales quejas de los trabajadores es que la Administración madrileña no tiene en cuenta el alto grado de dependencia de los pacientes o elevada tasa de baja laboral en el personal mientras las familias apuntan a los servicios y la alimentación que en este centro se ofrece.
"La reunión de trabajo con Ayuso ha sido correcta y se han tratado temas de la ciudad. Lamento que sea a tres meses de las elecciones cuando la pedimos hace años, pero ha sido positiva", ha remarcado el edil. "Simplemente 4,6 euros no dan para cinco comidas. Le he pedido que busque una solución para una situación tan complicada", ha añadido Rodríguez a los medios antes de asegurar que Ayuso le ha esgrimido "el mismo argumento" de que no se dan las circunstancias para romper el contrato de comidas.
Ayuso pide no "politizar" las residencias
Ya en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en el que ha vuelto a insistir en el "que te vote Txapote" contra el Gobierno de Pedro Sánchez, la lideresa ha asegurado que su Ejecutivo "no ha dejado de trabajar por todas las residencias" tanto de gestión directa como indirecta así como que "no deja a nadie descolgado". Así, Ayuso ha criticado que se "politice" la situación de las residencias y el "ruido" que dice se genera entorno a estos problemas.
"No veo bien que se genere este ruido y se cree un pleno extraordinario antes de un Consejo de Gobierno para condicionarlo", ha dicho sobre el equipo de Gobierno local para asegurar acto seguido que "no ayuda a nadie y solo se politiza una situación" de la que dice hacerse cargo. Según sus palabras, la región "pone a disposición los recursos que se permiten" mientras trabajadores, vecinos y ayuntamiento genera un "clima" que no es el mejor "si queremos ser honestos".
Así, ha afirmado que en este centro "la ratio de trabajadores duplica la media nacional marcada por ley", -afirma que trabajan 476 personas para 480 residentes- algo que "también ocurre con el personal sanitario" mientras los residentes "han dado una nota alta al servicio". Con todo, ha sostenido que su intención es buscar "lo mejor para los residentes" y estar abiertos a propuestas. "No obstante, cualquier queja, sugerencia o aportación, estamos obligado a atenderlo y por supuesto mejorarlo", ha asegurado.
Nuevo ataque a los médicos
Estas palabras chocan frontalmente con las que ha defendido tan solo unos instantes después en contra de los médicos de la región, todavía en huelga y con la convocatoria de una manifestación multitudinaria a la vuelta de la esquina. Según la lideresa, los paros "no se van a desconvocar hasta las elecciones ya que es una huelga "política". "Las reivindicaciones que hacen esta semana ya las pusimos sobre la mesa desde el primer día. Tienen soluciones directas que han desconvocado las huelgas en otras comunidades", ha criticado.
Así, Ayuso ha insistido en calificar las protestas como una "huelga política" debido a que "no tienen motivos para ir a las urnas a favor", proponiendo planes para, por ejemplo, crear empleo. "Necesitan la inestabilidad y la rebelión. Cuando alguien va a la sanidad pública madrileña dicen que va todo bien, pero es lo que hace la izquierda desde 25 años, van donde pueden hacer dolor", ha sostenido una presidenta que dice combatir esta situación "con las cifras".