Nueva polémica política en Madrid con los migrantes, sin quererlo, en el centro. Tras las controvertidas afirmaciones de Isabel Díaz Ayuso sobre el "caos", la "oleada masiva" y las agresiones sexuales que atribuye a los inmigrantes en Canarias, su compañero de partido y alcalde de Madrid ha censurado un acto en recuerdo a las personas migrantes fallecidas en los últimos meses. El Gobierno de José Luis Martínez-Almeida no ha autorizado la celebración de un evento social en el madrileño barrio de Carabanchel en pro de la defensa de los derechos humanos en los procesos migratorios alegando el descanso de los vecinos, sin embargo, la convocatoria es por la mañana -entre las 11 y 14 horas-, lo que ha encendido a las asociaciones culturales y vecinales, que denuncian el "atropello intolerable a la libertad de expresión".

Almeida veta un acto por los migrantes fallecidos

El Ayuntamiento de Madrid no quiere dar luz verde a un encuentro para recordar a los migrantes fallecidos en el último año, precisamente en un contexto de fuerte presión migratoria y en el que se conoce que más de 6.000 personas han perdido la vida en el 2023 en su intento por llegar a las costas de España. Así lo ha denunciado la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto, barrio madrileño en el que esta agrupación así como otras defensoras de Derechos Humanos han convocado un encuentro bajo la premisa de celebrar la Conmemoración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en recuerdo de las personas que han perdido la vida en procesos migratorios.

"D. Carlos Izquierdo Torres, Presidente de La Junta Municipal de Carabanchel, del Ayuntamiento de Madrid, ha dictado un Decreto por el cual DENIEGA AUTORIZACIÓN" para la celebración de este acto, "en el que participarían personas de asociaciones defensoras de Derechos Humanos y artistas de cultura africana", asegura esta entidad, que explica que la argumentación aportada por parte del Gobierno de José Luis Martínez-Almeida es el descanso vecinal. "La excusa expuesta es que “dado el horario y la proximidad de las viviendas al espacio en el que se desarrollaría la actividad en cuestión, no es posible garantizar que no se producirá perturbación en el descanso de los vecinos”", afirman los vecinos de este barrio.

Cabe destacar, y ellos mismo lo hacen, que este evento está convocado para el próximo sábado 27 de enero en horario de mañana, concretamente entre las 11 y 14 horas, en la Plaza de la Emperatriz, de Carabanchel Alto, por lo que "difícilmente puede impedir el descanso de los vecinos". "La desautorización municipal se basa en un artículo que explícitamente no es aplicable", denuncian. Y es que el Consistorio apela a la ordenanza del ruido, "según establece el artículo 41 de la Ordenanza de Protección contra la contaminación acústica y térmica de 25 de febrero de 2011 del Ayuntamiento de Madrid". Por eso, para la Asociación el decreto denegatorio "mutila el articulado".

"Un atropello intolerable a la libertad de expresión"

"1. Las actuaciones musicales en la vía o espacios públicos (…) no podrán ocasionar molestias que impidan el descanso de los vecinos o el normal desenvolvimiento de las actividades propias del local receptor, ni afectar a los objetivos de calidad acústica que se establezcan por la normativa de ruido”. El citado artículo 41 de la ordenanza expone que "ls actuaciones musicales en la vía o espacios públicos no estarán sometidas a autorización administrativa en lo que se refiere al ámbito de aplicación de esta ordenanza, sin perjuicio de que no podrán ocasionar molestias que impidan el descanso…", reza en el citado artículo, por lo que no sería aplicable al celebrarse de mañana un sábado.

Para apuntalar su denuncia pública cabe destacar que la entidad que ha organizado el evento ha señalado en su memoria de convocatoria su compromiso de que "el volumen máximo de emisión de los dispositivos musicales se mantendrá por debajo de ese límite establecido" al tiempo que ha puntualizado que "en un radio de 150 metros desde la localización del evento no existen residencias de mayores, centros sanitarios con hospitalización o con servicios de urgencias, o centros docentes cuyo horario de funcionamiento coincida con el del acto programado". Ante esto, tanto la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto como las colaboradoras tildan esta prohibición de "un atropello intolerable a la libertad de expresión, un abuso de autoridad y una decisión contraria a la legislación del propio Ayuntamiento".

"La decisión municipal refleja una total falta de humanidad, al negar la celebración de un acto que precisamente trata de tener un recuerdo solidario para esas personas ahogadas", apuntan en un comunicado en el que hacen mención directa a las más de 6.000 personas que han fallecido a lo largo del ya pasado año 2023 en su intento de llegar a las playas nacionales. Así, dejan la puerta abierta a presentar "cuantas reclamaciones estime convenientes", así como a buscar otras opciones para la celebración de ese acto, al considerar que "se trata de un derecho y una muestra de responsabilidad ante las víctimas de los procesos migratorios".

Ayuso habla de "caos" y "oleada" en Canarias

Esto se ha producido casi al mismo tiempo que unas polémicas palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, quien ha exigido este miércoles al Gobierno de Pedro Sánchez un plan detallado "capaz de suministrar servicios públicos y atención" a los inmigrantes que están llegando a España de forma ilegal y que permita coordinarse con las comunidades autónomas y los ayuntamientos donde se las está trasladando. "Es imprescindible contar con información, lo más precisa posible, de la tremenda oleada de personas que utiliza Canarias como puerta de entrada en Europa", ha señalado Isabel Díaz Ayuso desde Alcalá de Henares, localidad en la que se produjeron altercados entre varios migrantes acogidos en el acuartelamiento Primo de Rivera el pasado fin de semana.

Con la excusa de esta reyerta la presidenta ha denunciado públicamente que "se están investigando agresiones sexuales a algunas mujeres del municipio y se producen peleas dentro y fuera del centro", así como que "se ha detectado también un brote de sarna, del que se ha hecho cargo la Comunidad de Madrid para tratar a ocho inmigrantes, y evitar que se propague a los demás y, por tanto, protegerles". Unas afirmaciones que horas después, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Marín, ha negado. "En estos momentos no hay abierta investigación vinculada a los migrantes del cuartel Primo de Rivera. Es de una extrema gravedad mezclar migración con inseguridad", ha sostenido.

"El Gobierno central no ha proporcionado ninguna información al Ayuntamiento, ni se ha coordinado con las administraciones locales. Es un auténtico caos", ha lamentado Ayuso en su comparecencia para después poner el foco en una supuesta falta de información sobre lo que ha tildado de una "oleada masiva". "Es imposible hacerlo (proporcionar unos servicios públicos de calidad, sanidad, educación y prestaciones sociales) si no conocemos el origen de estas personas, cuántas son, qué circunstancias personales arrastran…", ha sostenido antes de denunciar que tanto el Ministerio del Interior como la Delegación del Gobierno no están actuando "con seriedad" y "lo que están haciendo es abandonar estos inmigrantes y a las administraciones que tenemos que atenderlos".