La Comunidad de Madrid autoriza la caza excepcional de jabalíes, conejos y palomas debido a su expansión a las ciudades como consecuencia del estado de alarma y la suspensión de todas las actividades. Esta medida entró en vigor el martes después de que se publicara en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCAM) y estará vigente durante dos meses.

Desde la Consejería de Medio Ambiente indican que el objetivo de esta medida es el “control de daños en las cosechas y explotaciones ganaderas originados por el aumento de algunas especies de fauna silvestre”. Se trata, según explican, de una normativa ante la “negativa” del Ministerio de Agricultura de “establecer un marco común nacional ante el mismo riesgo” en otros territorios.

El Gobierno regional busca garantizar la seguridad del tráfico rodado en los puntos donde han tenido lugar accidentes graves como consecuencia de la incursión de animales en las diversas calzadas.

Se han detallado las zonas concretas en las que incide esta medida y los métodos para realizar la actividad acorde con cada especie. Además, se ha regulado el número de personas con licencia que pueden permanecer juntas y manteniendo una distancia de seguridad para acometer la tarea.

“Se trata de tres poblaciones cinegéticas que causan graves daños en viñedos y huertos, como es el caso de los conejos, así como por la paloma torcaz en cosechas de garbanzos o lentejas”, explican desde Medio Ambiente. “Los jabalíes ocasionan deterioros en los maizales, pero, sobre todo, se autorizan los controles en los municipios con el objetivo de evitar accidentes de tráfico en las carreteras”, aclaran.