La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha participado en el Foro ABC-Deloitte, donde ha presentado su fórmula nacional para frenar las políticas del Ejecutivo de coalición. En este sentido, cree que su Gobierno en Madrid es “el espejo que refleja el fracaso del socialismo” en España, por lo que ha explicado su programa de acción a nivel nacional según su dinámica política.
Uno de los aspectos que ha resaltado en su receta nacional es su guiño a Ciudadanos, asegurando que es imprescindible que el centro y la derecha vuelvan a unirse, mostrándose convencida de que se volverá a hacer para establecer un Gobierno reformista.
La propuesta de Ayuso se centra sobre todo en el terreno económico. Así, plantea que el salario mínimo interprofesional esté exento de impuestos y cotizaciones, ya que, a su parecer, “los más desfavorecidos contarían con 850 euros más al año, y los empresarios dispondrían de más recursos para contratar, invertir o afrontar deudas”. También plantea ayudas fiscales a los empresarios.
En su intervención, la presidenta madrileña ha querido elogiar al rey emérito en el día en el que se cumplen 40 años del golpe de Estado del 23-F. “Cuando la casa de nuestra soberanía nacional estaba sitiada y la ciudad de Valencia controlada por una minoría armada incapaz de aceptar el salto constitucional, bastaron dos minutos y nueve segundos del monarca para devolver el orden y la paz social a los 38 millones de españoles”, ha expuesto antes de mostrar su profundo reconocimiento a Juan Carlos I: “Mi reconocimiento a Don Juan Carlos y mi repulsa a quienes quieren reescribir la historia de nuestra democracia”.
Además, también ha condenado las protestas que se han producido en los últimos días tras el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél y ha acusado a miembros del Gobierno de alentar los actos vandálicos. Así, insta a “la expulsión inmediata de las instituciones democráticas de quien lo apoye. Como es el caso del chavista vicepresidente”, ha comentado en una clara referencia a Pablo Iglesias.
Respecto a la división en España, la popular considera que solo hay una división: “A un lado, quienes defendemos la democracia liberal, la unidad de España y un Estado con poderes limitados. Y al otro, los liberticidas, revolucionarios y, por tanto, tiranos”.
