Hace tan solo unos días, el mayor incendio del verano provocó graves daños medioambientales en las inmediaciones de este gran enclave natural. Ahora, la UNESCO, a través del Consejo Internacional de Coordinación del Programa Man and the Biosphere, acordó declarar la Ribeira Sacra y las Sierras del Oribio y Courel como Reserva de la Biosfera.

La decisión es de suma importancia para estos espacios que se extienden por una superficie total de más de 306.000 hectáreas y, con la decisión del organismo internacional, se convierte en la segunda Reserva de la Biosfera de Galicia por tamaño.

Las zonas incluidas bajo la nueva denominación abarcan 23 municipios, la mayoría (18) de la provincia de Lugo en los que viven más de 75.000 habitantes.

Con la Ribeira Sacra y las sierras de Oribio y Caurel, la comunidad gallega dispone ya de 7 Reservas de la Biosfera lo que significa, según datos hechos públicos por la Xunta de Galicia, que tiene esta calificación el 35% de todo el territorio y, a su vez, supone que el 42% de toda la Comunidad se encuentra bajo el amparo de algún tipo de protección.

Junto a la Ribeira Sacra y las sierras de Oribio y Caurel, son Reservas de la Biosfera en la región Terras do Miño, Área de Allariz, los Ancares Lucenses y Montes de Cervantes, Navia y Becerreá; el río Eo, Oscos y Terras de Burón; Transfronteriza Gerês-Xurés y Mariñas Coruñesas-Terras do Mandeo.

Cabe recordar que el proyecto hasta la meta final de la designación por parte de la Unesco se inició a finales de 2017. Un “largo camino”, como han definido el proceso desde la Xunta, “impulsado y liderado desde el principio” por la administración autonómica y que se concretó con la entrada de 2019 a través de una primera propuesta elaborada en colaboración con el Instituto de Biodiversidade Agraria e Desenvolvemento Rural (Ibader) de la Universidad de Santiago de Compostela y la Fundación Juana de Vega.

Uno de los primeros en mostrar su satisfacción por la noticia ha sido el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo.

A su juicio, este reconocimiento “ensalza el valor singular de este territorio a nivel internacional”, añadiendo que se trata de “un premio a la singularidad de un enclave único”.

Del mismo modo, aseguró que esta declaración anima a seguir llevando el nombre de la Ribeira Sacra por todo el mundo para que sea redescubierta, especialmente en el marco del actual Año Santo bienal. A modo de conclusión, Feijóo también adelantó que “una vez conseguida la distinción”, lo siguiente será continuar “dando los pasos necesarios para conseguir que Unesco declare la Ribeira Sacra Patrimonio de la Humanidad”.