La Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública ha convocado para el póximo sábado 26 de octubre a las 12.00 horas una manifestación para denunciar la situación que atraviesa la enseñanza pública en Galicia.
Será en Santiago de Compostela, partiendo de la Alameda, aunque saldrán autobuses desde distintos puntos de la región con destino a la capital. El objetivo es alzar la voz sobre los múltiples problemas que afectan al sector y que no admiten "parches ni remedios".
Según avanzan desde la organización, el Gobierno de Alfonso Rueda no ha atendido a ninguna de las demandas realizadas por los alumnos y el profesorado, a lo que hay que sumar muchos otros aspectos que han ido deteriorándose año a año como la redución del número de docentes o de especialistas para la atención a la diversidad, el aumento de profesores compartidos por varios centros y de la burocracia y la merma de recursos.
Apuntan todas las entidades que conforman la plataforma (CIG-Ensino, ANPAS Galegas, ERGUER, Asociación Socio-Pedagóxica Galega /AS-PG) que el inicio de curso ha sido "caótico" y ha estado "lleno de propaganda", cuando la realidad es que "falta personal y los recortes afectan a, por lo menos, medio millar de centros, es decir, a casi la mitad de los centros públicos de Galicia". Así lo indica Suso Bermello, secretario nacional da CIG-Ensino, sindicato mayoritario, que pone como ejemplo que en los últimos días ha habido incidencias por falta de persoal en más de 120 centros, sobre todo, colegios de infantil y primaria.
La situación en los centros de secundaria, FP y enseñanzas de régimen especial no es mejor. En los últimos años "no han hecho más que ver cómo se reducen sus cupos, se amortizan las jubilaciones y se extiende la práctica de que el profesorado imparta más materias de las que es especialista para completar su horario lectivo que sigue siendo, junto con Madrid, el único que se mantiene en 20 horas lectivas semanales desde los recortes de la época de Rajoy", subraya.
Aulas masificadas y falta de profesores
Isabel Calvete, representane de ANPAS Gallegas, por su parte, hace hincapié en los "desdobles no autorizados en aulas que superan ampliamente las ratios máximas, en el auento de matrícula en los cursos que ya tenían entre 20 y 25 estudiantes, en que no se computa como doble o triple al alumnado con trastorno de conducta, discapacidad o dependencia y en que hay aulas con niños de distrintos niveles y edades en las que ya no se cumplen tampoco las plazas máximas".
Y la lista de problemas sigue: falta profesorado especialista, sobre todo, de Pedagogía Terapéutica, Audición y Lenguaje y Orientación, que cada vez tienen que compartir varios centros o se contratan a media jornada y falta personal cuidador.
Los sindicatos estudiantiles también denuncian que en los institutos de algunos pueblos no se permite cursar materias optativas de Bachillerato de forma presencial por la insuficiente dotación de profesorado y se obliga a hacerlo "a distancia". "Esto está ocurriendo, tanto en primer curso, como en segundo, a pesar de que se trata de las mismas materias realizadas de forma presencial el año anterior", indica Artai Gavilanes, representante de Erguer, que alerta de la importancia de esto cuando se trata de un año en el que ha de afrontarse la prueba de acceso a la universidad.
En lo que respecta a Formación Profesional (FP), apuntan desde este sindicato estudiantil, ha crecido "de forma exponencial" la oferta privada en detrimento de la pública, "mucho menor", lo que hace necesario "impulsar una mayor oferta gratuíta con una política de ayudas para el alumnado". En muchos casos, estos estudiantes "han de desplazarse fuera de su domicilio, afrontar gastos y pagar alquileres, lo que para muchas familias supone dificultades e, incluso, un impedimento".
La Xunta "censura y oculta información"
Todo esto choca de lleno con el discurso de la Consellería, de la que la Plataforma en Defensa de la Educación Pública, dice que “censura y oculta información”. "A los equipos directivos nos decían que no nos podían dar datos por orden de Inspección", aseguran, recalcando que "el bienestar de nuestros hijos e hijas es lo que menos interesa".
En este sentido Suso Bermello recuerda las denucias realizadas por la CIG-Ensino sobre los anuncios del Gobierno regional y lo que han bautizado como "Plan Mega-Trola" de la consejería (Plan Mega-Mentira). Da datos: "este curso académico hubo 80 plazas menos de PT y AL que el pasado y quedaron sin cubrir más de 30 plazas de atención preferente, esas que piden los centros para atender a un alumno o alumna con necesidades específicas de apoyo educativo"
"Lo que un día se denomina Plan Promociona y otro Plan Mega no son en realidad programas propios de la Consellería, sino planes financiados por la UE para, precisamente, garantizar una educación más inclusiva", destaca.
Educación, sin embargo, lamenta, "está utilizando estos fondos, más de 18 millones de euros, de forma fraudulenta, porque no se está destinando a las necesidades educativas especiales". "Hay profesores dando inglés, educación física o haciéndose cargo de tutorías", apuntan desde la Plataforma, aclarando que "este perfil de profesorado es necesario, pero debe ser contratado como interino con fondos propios del departamento regional y durante todo el curso y no desde el día 11 de septiembre hasta el 30 de junio, solo para ahorrar dinero.
Sobre el aumento del número de profesores del que presume la Xunta, Bermello detalla que esto se debe "al incremento de la oferta formativa de FP", pero insiste en que en las otras etapas "ha habido recortes y se han amortizado muchas jubilaciones. Así lo han podido constatar, además, a través de un cuestionario abierto que han habilitado.
"En las enseñanzas de secundaria, bachillerato, FP y régimen especial la pérdida de calidad educativa es muy clara porque no existe ninguna medida para paliar las elevadas ratios, la atención a la diversidad, la privatización, el exceso de trámites burocráticos e los abusos , en algunos casos muy contrastados, de Inspección", resume.
Por otro lado, además, la Consejería, denuncia, "juega a la estrategia de dividir, hacer que cada centro tenga que pelear por la dotación de más personal de forma individual", zanja.