El próximo domingo se celebran las elecciones en Euskadi y el País Vasco. Especialmente polémica está siendo la convocatoria en el primero de los enclaves, con alcaldes socialistas y del BNG de la zona de A Mariña pidiendo formalmente a Feijóo que aplace la cita electoral por el riesgo al contagio.
El brote detectado en la comarca lucense ha puesto sobre aviso a las partes involucradas en los comicios. Sin embargo, el presidente de la Xunta, sabedor de que una baja participación podría poner en problemas su mayoría absoluta, ha pedido a los ciudadanos que se movilicen en las urnas asegurando que se cumplirán todos los protocolos de seguridad exigibles para que la cita no suponga ningún riesgo.
Este mismo jueves la Xunta ha informado de que se han distribuido entre los 2.395 locales electorales de Galicia los materiales de prevención y protección necesarios para que la jornada electoral se realice de forma segura en base a unas pautas “del protocolo elaborado por el Gobierno gallego”.
Un protocolo que, tal y como advierte la nota remitida por la administración regional, consiste en la instalación de cartelería para facilitar el seguimiento de las pautas sanitarias, además de marcar al flujo de circulación las entradas y las salidas; el encargo a los representantes de la administración de asegurar que se mantiene la distancia interpersonal; el uso de mascarilla obligatorio (se facilitarán a aquellos que no dispongan de ninguna); el uso de pantallas protectoras en el caso de los apoderados, el lavado de manos antes y después de depositar el voto; y medidas específicas para que el DNI no sea pasado de mano en mano (se depositará en una bandeja para que no sea necesario el contacto.
Además, durante toda la jornada electoral se intensificarán las actuaciones de limpieza y desinfección haciendo hincapié en las superficies más expuestas. Con todo esto, el PP se ha echado en tromba contra la oposición por la voz de alarma sobre el riesgo que supone la convocatoria: “Las mismas autoridades sanitarias que han hecho frente al brote grande (el pico de la pandemia) son las que nos siguen asesorando ahora para mantener las elecciones con normalidad. Son esas autoridades las que nos han dicho que las elecciones se hagan cuanto antes porque si las dejamos para septiembre u octubre estaríamos en una situación de muchísimo más riesgo", ha explicado Feijóo, condenando que nadie pidiera la suspensión de la selectividad y que ahora “metan miedo” a los votantes.
En la misma línea se ha manifestado el presidente del PP, Pablo Casado, quien ha explicado que los brotes están “perfectamente localizados”. El dirigente ha dicho que no entiende el “alarmismo” porque votar es “totalmente seguro”.
