“Esta justicia es una ruina”. Este podría ser el título de una serie que analizara la situación de la justicia en Castilla-La Mancha, donde un juez es detenido por segunda vez por la jueza que lo sustituye en un juzgado de Talavera donde hasta hace un año era titular; el juez detenido denuncia a un fiscal por prevaricación, cohecho, tráfico de influencias y contra la ordenación del Territorio; el teniente fiscal se querella contra el juez por calumnias, que a su vez demanda a otra jueza y al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, quien se da por enterado de las denuncias contra otros abogados, esposas de fiscales y jueces talaveranos. Un tótum revolútum que ha llevado este miércoles a la detención del juez decano de Talavera de la Reina, Fernando Presencia.

La sustituta se rebela contra el jefe…

La detención del juez Presencia la ha ordenado la jueza que le sustituye en el Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 2 de Talavera de la Reina, ya que éste hizo caso omiso hasta en tres citaciones anteriores, todas ellas correspondientes a las diligencias abiertas contra él por la querella presentada por el teniente fiscal talaverano, Ángel Demetrio de la Cruz Andrade, por los presuntos delitos de injurias y calumnias, denuncia falsa y fraude procesal. El juez decano acusó al fiscal de un pelotazo urbanístico por la construcción de un chalet dentro de un lecho fluvial, en contra de la prohibición ordenada por la Confederación Hidrográfica del Tajo. Según la querella, la vivienda del fiscal tiene una superficie construida de 466 m2, lo que excede en más de un triplo la superficie construida permitida a las viviendas de protección oficial, que suele ser de 140 m2 dependiendo del régimen al que se adscriba.

…Y el jefe denuncia a su jefe

Fernando Presencia, que en su día indicó que desde su condición de juez decano de Talavera había tenido acceso a numerosas quejas verbales de profesionales y abogados de la existencia de un “entramado de corrupción” en el mismo seno de los juzgados de esa ciudad, denunció también al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, Vicente Rouco, a quien señaló como la “X” de ese entramado. Y lo hizo mediante el escrito de recurso de súplica contra el auto definitivo dictado por el TS en aquellas actuaciones.

“Me detienen por denunciar la corrupción”

En el mismo momento de su detención, el juez Presencia, en declaraciones a El Mundo, ha asegurado que su orden de detención “es totalmente irregular y es la consecuencia de que yo haya denunciado numerosos casos de corrupción urbanística”. Según la versión de Presencia, su detención de este miércoles “no debería producirse de ninguna de las maneras, y vulnera la Ley Orgánica del Poder Judicial”. La intención del juez es “pedir un hábeas corpus por detención ilegal” en cuanto sea trasladado a los juzgados, según ha manifestado.

Suspendido por CGPJ

El caso es que hace ahora nueve meses, el Consejo General del Poder Judicial suspendía de forma cautelar al que en ese momento era titular del Juzgado número 2 de Talavera, Fernando Presencia. Todo después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha abriera juicio oral contra él por un presunto delito de “prevaricación judicial”. La suspensión vendría dada por la tramitación de diligencias en un caso de atropello de un peatón con lesiones, omisión de socorro y posterior fuga, cuyo autor era, supuestamente, amigo del juez Presencia, que archivó el caso sin escuchar a las partes ni practicar las pruebas debidas que los abogados pidieron hasta en tres ocasiones.

¿Es el juez víctima de la corrupción?

Sea como sea, el caso es que Fernando Presencia, otrora conocido como “el señor de los grandes concursos”, está ya apeado de la Judicatura, señalado como un “juez corrupto”, acosado por Manos Limpias, según sus declaraciones ante la policía. Ha denunciado casos de corrupción y se ha visto inmerso en situaciones vividas por otros jueces que se atrevieron a salirse del carril marcado, como es el caso de Baltasar Garzón, que abrió las primeras diligencias contra la banda Gürtel y fue condenado a  11 años de inhabilitación y expulsado de la carrera judicial por el Tribunal Supremo a instancias de los cabecillas de la trama corrupta liderada por Correa y vinculada al PP; Elpidio Silva, que envió a la cárcel al ex presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, y fue condenado a 17 años de inhabilitación por un delito de prevaricación continuada; Victoria Rosell, que cuando pidió la excedencia para ir en las listas de Podemos su sustituto, Salvador Alba, preparó con un imputado una declaración que iba a servir a este juez para redactar un informe contra Rosell que le había solicitado el Tribunal Supremo para decidir la apertura de una causa contra la exdiputada…mientras tanto, los “espejel” y los “lópez”, repetidamente recusados por su proximidad al PP, continúan al acecho desde la Audiencia Nacional.