El concejal del Partido Popular en Vita (Ávila), Raúl Blázquez, ha decidido pasar a ser edil no adscrito tras negarse a respaldar la moción de censura contra el alcalde, Antonio Martín. Esta iniciativa había sido impulsada por el partido Por Ávila, que acusaba al regidor de hacer comentarios durante las fiestas del pueblo que, según ellos, promovían la violencia de género y la pedofilia.
Debido a la negativa de Blázquez a apoyar la moción, el Partido Popular se queda sin representación en el Ayuntamiento de Vita. Sin embargo, el presidente provincial del PP, Carlos García, ha asegurado a los vecinos que el partido seguirá comprometido con el municipio a través de otras instituciones donde mantiene representación.
En un comunicado, García subrayó que, aunque la falta de apoyo de Blázquez impide avanzar con la moción de censura, el Partido Popular no puede seguir apoyando al alcalde tras los hechos ocurridos durante un concierto en las fiestas locales.
García también explicó que, dado que no se ha logrado consenso para la censura y que los representantes democráticamente elegidos, como concejales, no pueden ser destituidos salvo por vía judicial, aceptan que Blázquez, junto al alcalde, asuman la gestión del Ayuntamiento fuera de las filas del PP.
