Todas las lagunas e incógnitas sin resolver que deja la declaración de Vilaplana

Maribel Vilaplana acudía este lunes al juzgado de Catarroja para declarar ante la jueza que investiga la DANA, Nuria Ruiz Tobarra. Recibida por una víctima de la tragedia entre gritos de "cuenta la verdad", la periodista llegaba a la sede judicial para permanecer dentro de ella unas cuatro horas. La periodista rompió a llorar en múltiples momentos de la declaración, pero aún así, y habiéndole ofrecido la magistrada detenerla, quiso continuar hasta el final. Tal y como comentaban fuentes de su entorno a ElPlural.com en las horas previas a la citación, Vilaplana vivía este momento con la "esperanza" de que todo termine, pero lo cierto es que su testimonio aún deja algunas incógnitas por resolver. 

Maribel Vilaplana y Carlos Mazón mantuvieron una comida en El Ventorro el día del devastador temporal que se alargó casi cuatro horas. Tal y como ella confirmaba en su carta, la periodista llegaba pasadas las 15:00 horas y se marchaba "entre las 18:30 horas y las 18:45 horas". Sin embargo, lo que no se supo hasta días antes del aniversario de la DANA, es que el ya expresident la acompañó hasta el parking donde ella tenía estacionado su coche, situado en la Glorieta-Paz. Es decir, en dirección contraria al Palau de la Generalitat, donde Mazón aseguró que llegó a pie desde el restaurante tras despedirse de ella a las puertas del restaurante. 

La comunicadora aseguró que no escuchó las llamadas que Mazon mantuvo dentro del local mientras transcurría su encuentro. En total, ocho, las que figuran en el registro aportado por el Consell a la comisión de investigación en Les Corts. La primera llamada llegó a las 17:37 horas, por parte de la entonces Consellera de Justicia e Interior, Salomé Pradas, quien volvería a hablar con Mazón a las 18:16 horas, las 18:25 horas y las 18:30 horas. Por otro lado, el presidente de la Diputación de Valencia, Vicente Mompó, les interrumpió a las 17:46 horas, las 18:25 horas y las 18:27 horas. Además, a las 18:28 horas, el alcalde de Cullera, Jordi Mayor, también habló con Mazón.

Sin embargo, Vilaplana ha asegurado que no escuchó las conversaciones que el político mantuvo por teléfono: "Mazón hablaba y yo no escuchaba", contó. Por otro lado, afirmó que, en ningún momento, el popular pronunció las palabras "DANA, lluvias o Cecopi", y añadió que, como en la capital del Turia no llovía, "no tenía percepción de que estuviera pasando nada". Por otro lado, la comunicadora desveló que, durante su encuentro, el dueño del restaurante le subió al popular un sobre con papeles que, según Vilaplanal, Mazón firmó.

Días antes del primer aniversario de la DANA, una nueva información señalaba que Mazón llegó cambiado de ropa al CECOPI. Este lunes, Vilaplana contaba que el expresident se cambió de ropa en El Ventorro, aunque no en su presencia: "Luego la prensa dirá que se cambió delante de mí". No obstante, no pudo confirmar si la prenda que se puso fue el jersey amarillo con el que llegó a L'Eliana horas más tarde. 

Vilaplana también se pronunció sobre el último detalle conocido antes de su declaración: el vídeo de las inundaciones de Utiel que recibió en su móvil. La periodista explicó que recibió el enlace a las 17:39 horas a través de un chat familiar, momento en el que Mazón atendía una llamada de teléfono. Sin embargo, la del Levante aseguró no haber abierto el vídeo en ningún momento y, por lo tanto, habérselo enseñado al político: "No lo vi, y me atormenta no haberlo hecho".

Sin despejar el misterio de los 37 minutos de Mazón

Carlos Mazón llegó al Palau de la Generalitat en torno a las 20:00 horas, pero se desconoce dónde estuvo hasta que llegó allí. Maribel Vilaplana no pudo despejar las dudas sobre los 37 minutos que el popular estuvo apagado y fuera de cobertura, entre las 18:57 horas y las 19:34 horas. Lapso de tiempo en el que no respondió a ninguna llamada, llegando a cancelar dos llamadas de la exconsellera de Justicia, Salomé Pradas. 

En esos momentos, Vilaplana asegura que estuvieron hablando de fútbol y que lo invitó a ver un partido del Levante: "Recuerdo que salimos del restaurante y seguimos hablando. Yo trabajo para el Levante UD. Quería que él viniera a ver un partido, un derbi contra el Elche. Le dije que se comprometiera, es la conversación de la salida. [...]". Fue entonces cuando Mazón le preguntó si le acompañaba al aparcamiento: "Salimos de El Ventorro con normalidad, paseamos. No lo comenté en la carta porque no me pareció relevante", añadía. Y es que, durante la declaración, la comunicadora aseguró que el político "no tenía prisa, y yo tampoco". 

Vilaplana aseguró que tenía estacionado su coche en la segunda planta por "una manía personal”: “Tengo un coche grande. Para qué tengo que hacer maniobras si puedo aparcar ancha”. Sin embargo, no pudo aportar el ticket del parking, tal y como se lo había pedido la jueza, porque aseguró que no lo conserva. 

En su carta a la ciudadanía, Vilaplana contaba que se había puesto "en contacto" con Mazón "cuando le fue posible", "nada más entender la magnitud de lo que había pasado", pero no especificaba cuándo. Este lunes, ante la jueza, la periodista reconoció que hablo con él esa misma noche: "La conversación era: ‘Dios mío, ¿qué ha pasado?’. Y él me respondía: ‘Esto es muy gordo. Es muy grave".

Vilaplana contó que le preguntó a Mazón si estaba al tanto de la situación mientras comían en El Ventorro: "¿Cómo voy a saber eso?”, le respondió él. Aunque ella le pidió que su nombre no trascendiera, días después, el expresident se puso en contacto con ella para prevenirle de que terminaría saliendo. "Me entró un ataque de pánico. Acabé borrando todo”, dijo la periodista, que aseguró que, entonces, borró al popular de su lista de contactos y eliminó el chat.