Varios miembros del partido de ultraderecha España 2000 se han presentado la pasada noche ante el domicilio de la vicepresidenta de la Generalitat valenciana, Mónica Oltra, enmascarados, con una bandera de España y con gritos a favor de "la unidad de España".
Los ultraderechistas han difundido unm vídeo a través de las redes sociales.
La vicepresidenta valenciana ha dicho este jueves en la Cadena SER que la Delegación del Gobierno ha minimizado el problema de la ultra derecha en esta comunidad autónoma, que, según ha subrayado, "se ha ido de las manos". Oltra, sin embargo, no ha pedido la destitución del delegado, Juan Carlos Moragues, porque "me parece que se ha dado cuenta" y "hay que darle margen a rectificar", después de su gestión de las manifestaciones violentas de ultras el pasado día 9.
Oltra ha explicado que había acabado de cenar con su familia cuando los ultras le hicieron el escrache. "Mi hijo mayor me dijo: 'mamá, mira, que hay una fiesta'. Y yo pensé, 'pues aún quedan semanas para Halloween, sí que se adelantan'”. Pero la dirigente de Compromís se dio cuenta entonces de que no era una fiesta y apartó a sus niños de la ventana.
"Han venido a chillarte"
Según ha relatado Oltra, su hijo pequeño, que anoche se acostó con la idea de una fiesta, esta mañana se ha enterado de que no se trataba de ninguna celebración. “¿Sabes la fiesta? Dicen que no fue una fiesta, que venían a chillarte”.
“Nos hemos conjurado los tres a que en democracia estas cosas no se hacen. Y vamos a defender la libertad y vamos a ir al cole con la cabeza bien alta”, ha explicado la vicepresidenta valenciana.
Joan Ribó pide que se judicialicen estos actos
El alcalde valenciano, Joan Ribó, en declaraciones a la misma emisora, ha dicho que "la extrema derecha ha campado como ha querido en Valencia" y ha añadido que “debemos de estar preocupados” porque se están vulnerando derechos constitucionales.
Ribó ha lamentado que ninguno de los detenidos tras los incidentes del 9 de octubre haya pasado a los juzgados: “Es importante que los delitos de odio se traten a nivel judicial porque no es solo una cuestión policial”.
