La amenaza de una repetición electoral sobrevolaba Cataluña hasta que las formaciones independentistas han enterrado el hacha de guerra y han escenificado una aproximación. Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) y Junts per Catalunya (JxCAT) han alcanzado un principio de acuerdo que desbloquearía la legislatura y la investidura de Pere Aragonès.
Un equipo comandado por Jordi Sànchez y otro encabezado por Pere Aragonès han cerrado los flecos existentes en el independentismo y han alcanzado un consenso para evitar la repetición electoral después de tres meses de tiranteces entre republicanos y post convergentes.
El acuerdo entre los dos principales partidos del independentismo catalán se produce cinco días después de que tanto ERC como Junts como la CUP se comprometieran a llegar a un acuerdo de mínimos para investir a Pere Aragonès y postergar la hegemonía secesionista en Cataluña.
ERC y Junts han pedido disculpas por haber encallado la situación y se han comprometido a construir un Govern que restituya la confianza de los catalanes. Así lo han anunciado a través de un comunicado conjunto en el que se pone la guinda al pastel que los republicanos cocinaron con la CUP.
Los dos equipos negociadores están ultimando el acuerdo y durante la mañana de este lunes ambas fuerzas lo harán efectivo y lo publicarán, escenificando la tardía sintonía mediante una rueda de prensa conjunta con Pere Aragonès y Jordi Sànchez como protagonistas.
Ambas formaciones sí adelantan que el objetivo no es otro que "servir al país y a su gente de la mejor manera posible" y gobernar "por todo el mundo". Asimismo, ambas se comprometen a avanzar "hacia el objetivo común de la independencia en forma de República Catalana". Por su parte, ponen de relieve la "máxima confianza entre socios", así como "colaboración y trabajo conjunto con la CUP".
