La consellera de Presidència de la Generalitat de Cataluña, Laura Vilagrà, ha rechazado "con rotundidad" la convocatoria de elecciones pese al cierre en falso de la crisis, que se saldó en la noche del miércoles con la destitución del hasta entonces vicepresidente, Jordi Puigneró. La dirigente de Esquerra Republicana ha reivindicado la "vigencia" del Govern, asegurando que la acción política del Ejecutivo "continuará".

El Ejecutivo continuará. Así lo ha anunciado la propia Vilagrà en una entrevista concedida a Catalunya Ràdio este mismo jueves, después de la rueda de prensa nocturna convocada por el president, Pere Aragonès, para comunicar el cese fulminante del hasta entonces vicepresidente de la Generalitat.

La consellera de Presidència ha descartado “con rotundidad” la posibilidad de convocar elecciones, a pesar de la crisis entre los dos socios de Gobierno. El Ejecutivo, en palabras de Vilagrà, es “vigente”. “Justamente empezó hace año y medio, tenemos un programa que estamos ejecutando”, sugirió la dirigente republicana.

Vilagrà ha deslizado que el “conjunto de los consellers” han manifestado su voluntad de trabajar ante una “compleja” situación política, económica y social. “Tenemos que trabajar todos en la misma dirección”, ha agregado la titular de Presidència, quien ha apelado a la confianza entre los miembros del gabinete para actuar con “lealtad”. “Es lo que tenemos que hacer y espero que así sea a partir de ahora”.

Cese de Puigneró

El president de la Generalitat compareció en la noche del miércoles tras una reunión con el conjunto del Govern de manera extraordinaria y otra con el secretario de Junts, Jordi Turull. El máximo mandatario catalán inició su alocución reclamando perdón a la ciudadanía, debido al “complicado momento social” por el que pasa la autonomía. “Las desconfianzas no ayudan a nuestro objetivo”, apostilló de inmediato Aragonès, antes de anunciar el cese fulminante del que hasta ese momento era su vicepresident, Jordi Puigneró.

Aragonès reivindicó la necesidad de contar con un “Govern cohesionado”, lo cual no es compatible con la moción de confianza planteada por sus socios de Junts. La desconfianza creció entre los dos componentes del Ejecutivo catalán, por lo que anunció la destitución de Jordi Puigneró. “El vicepresidente no me informó de la cuestión y he decidido cesarlo a la espera de que Junts proponga una nueva persona para ocupar sus cargos”, abundó.

Ecos desde Madrid

 

Lejos del ruido de la Generalitat, el portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, ha trasladado su “máximo apoyo” al president de la Generalitat. El dirigente republicano, interrogado por los periodistas en los pasillos de la Cámara Baja,  ha subrayado que la decisión de Aragonès exhibe que a su formación “no le tiembla el pulso” cuando han de tomar decisiones importantes.

Rufián, cuestionado sobre los motivos de la destitución, ha admitido que se ha producido en un marco “complicado”. No obstante, el portavoz parlamentario de los republicanos ha deslizado que el “ruido” en torno a la crisis del Ejecutivo catalán era “contraproducente”. “ERC está centrada en la acción de gobierno, en ayudar a la gente, en hablar por y para ellos. Lo demás es accesorio”, ha zanjado.