Por segundo día consecutivo continúan los disturbios en el barrio de Sants de Barcelona en torno al edificio de Can Vies, centro 'okupa' desde hace 17 años. El Ayuntamiento ha informado de que en la noche de este martes grupos de alborotadores provocaron graves disturbios quemando 53 contenedores de basura y volcando otros 220, además de romper cristales de entidades bancarias, cajeros automáticos, cabinas de teléfonos, semáforos y marquesinas. También se intentado quemar la excavadora destinada a derribar la casa, que está siendo ahora custodiada como el resto del edificio. El Ayuntamiento evalúa los daños en 78.000 euros hasta ahora.

Duras imágenes
Los Mossos detuvieron a ocho jóvenes, dos de los cuales ya han sido puestos en libertad con cargos. Sin embargo, los manifestantes hablan de brutalidad y exceso policial y se ha difundido un duro vídeo en el que los mossos golpean a un joven en bici que no se sabe si participa en las protestas o pasaba por allí.


En Twitter se han colgado los resultados que tuvieron esos golpes en el joven: una oreja desgarrada. Una imagen que ha circulado en plataformas como Menéame y que ha encrespado aún más los ánimos. La consellería de Interior ha alertado de que mantendrán firmeza ante las concentraciones previstas en el barrio y que hacen temer la posibilidad de nuevos brotes de violencia.






La oposición en el Ayuntamiento de la ciudad se ha mostrado muy crítica con el despliegue policial y de hecho el director general de los mossos, Manuel Prat, dimitió anoche de su cargo. Sin embargo, para el diputado de ICV-EUiA Jaume Bosch esta dimisión "llega tarde y mal". Se ha mostrado preocupado porque cree que el conflicto "no se resolverá con represión" y se ha mostrado convencido de que Prat "ha dimitido antes que verse desautorizado por el Parlament" ante la interpelación de ICV-EUiA acerca de esta cuestión.

ICV cree que se ha gestionado mal el asunto desde el origen
Bosch ha hablado de "tensión generada" como consecuencia de la primera actuación policial aunque ha añadido que "la violencia es condenable, y consideramos que la quema de una furgoneta de TV3 es inadmisible" si bien "el Departamento de Interior tiene una responsabilidad grave por no haber hecho las cosas bien, y seguramente la forma de aislar a los violentos que se infiltran en las manifestaciones legítimas no es la más adecuada". "Pensar que la solución a Can Vies es la represión y repetir imágenes como las que hemos visto de policías agrediendo sin ninguna justificación a personas normales y corrientes es una forma de seguir envenenando el tema", ha alertado.

Según Bosch, "estamos entrando en una época de tremenda conflictividad social y pensar que contra esto sólo se puede actuar con actuaciones policiales es un grave error", y en este sentido, ha culpado al Ayuntamiento de Barcelona "de no haber negociado adecuadamente con los movimientos sociales del barrio de Sants".