El anuncio del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que enviará un requerimiento al ‘president’ de la Generalitat, Carles Puigdemont, para que aclare si este 10 de octubre proclamó o no la independencia de Cataluña, supone activar el artículo 155 de la Constitución, tal y como explican fuentes judiciales.

Explicación del 155
El ‘previo requerimiento’ al que se refiere el art. 155 "no es algo previo a su aplicación, es ya aplicación de ese precepto", explican constitucionalistas a ELPLURAL.COM. Al enviar dicho requerimiento "supone que el Gobierno ha apreciado que los responsables del Gobierno de Cataluña pudieran no estar cumpliendo ‘las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan’, o actuando ‘de forma que atente gravemente al interés general de España, el Gobierno’.

En este caso, ante la confusión generada ayer por la intervención del presidente de la Generalitat el Gobierno quiere que éste le confirme si se siente vinculado por el ordenamiento jurídico constitucional o por la nueva legalidad aprobada por el Parlament y suspendida por el Tribunal Constitucional.

Si la respuesta no resulta clara al respecto sobre cómo va a actuar el Govern en el futuro "se pasará a la segunda fase de aplicación del 155, con una propuesta de intervención jurídica de la Comunidad Autónoma que habrá de ser aprobada por la mayoría absoluta del Senado". El abanico de medidas es potencialmente muy amplio por mor del propio precepto constitucional y en este caso "pueden llegar a ser muy intensas caso de constatarse un incumplimiento constitucional tan grave como el que supone una declaración de independencia".

El 155 no tiene por qué llevar a la disolución de la Autonomía
Si hay un artículo de la Constitución nombrado hasta la saciedad por políticos y periodistas estos días es el 155. De breve articulado y redacción genérica, otorga amplios poderes al Gobierno estatal para intervenir parcial o totalmente la gestión del gobierno autonómico. El abanico es tan amplio que aplicar el 155 no tiene por qué equivaler, ni de lejos, a disolver la Autonomía de un territorio