Vox es el único partido que ha votado en contra de la nueva reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha. Un acuerdo entre PSOE y PP que ha incluido al 80% de los votantes de las últimas elecciones pero que ha dejado fuera a la formación ultraderechista, presidida por David Moreno.

Las cortes regionales han acogido un día histórico para Castilla-La Mancha, ya que después de 43 años, se aprueba la reforma del Estatuto de Autonomía con el 87,8% de los votos. El próximo paso será su aprobación en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, Vox ha decidido quedarse fuera del consenso que han tenido los dos principales partidos de la región.

Para Vox, el nuevo Estatuto de Autonomía solo aumenta el gasto político superfluo y presentarán enmiendas en todos los Ayuntamientos para su rechazo. Su presidente en las cortes regionales, David Moreno, defendía sus 35 enmiendas poniendo especialmente el foco en el aumento del número de diputados que, en todo caso, tendrá lugar después de las elecciones de 2027.

Vox contra todos

La formación verde se olvida del blindaje de derechos sociales y la actualización que supone con respecto al último estatuto, así como que también recoge las peticiones de los agentes sociales o el tercer sector. Según David Moreno, que defendía su rechazo a la reforma del Estatuto de Autonomía: “PP y PSOE son lo mismo, representan un bipartidismo plenamente compenetrado”. Otro de los puntos que defendía Moreno es que no es una petición real de los ciudadanos y que no va a cambiar la vida de los castellanomanchegos: “Han dedicado un año de legislatura a pactar los privilegios”.

En el turno del Partido Socialista, la portavoz Ana Isabel Abengózar recriminaba a Vox oponerse al Estatuto de Autonomía cuando su partido ni siquiera cree en el Estado de las Autonomías. Recordaba a la formación ultraderechista que son el grupo parlamentario más caro de la historia de las cortes y que los que más asesores tienen de la historia parlamentaria de Castilla-La Mancha.

“Lo único que pretenden es desmantelar desde dentro aquello en lo que no creen: Las Comunicades Autónomas, los derechos de las mujeres, la educación pública o la cohesión territorial. En definitiva, la democracia”


Así se refería Abengózar al discurso de Vox, calificándolo de populista y apuntando: “Sus enmiendas no son diferencia de criterio, son una amenaza directa al marco democrático en el que vivimos. Sus propuestas huelen a una época negra, a un tiempo en el que las libertades eran solo de unos pocos. Nuestro no a sus enmiendas está avalado y basado en que vivimos en una democracia, y son un claro retroceso al que decimos que no”, sentenciaba Abengózar.

Con Paco Núñez, líder del Partido Popular, también ha tenido sus más y sus menos el líder de la ultraderecha castellanomanchega. David Moreno acusaba a Núñez de ser flojo en su oposición y actuar como flotador del PSOE: “Hay que tener aguante, para después de lo que le han dicho, acordar el nuevo estatuto de autonomía con el PSOE. ¿Cómo se puede construir una alternativa al PSOE pactando con el PSOE?”

Nada más lejos de la realidad, ya que ambas formaciones políticas, y tal y como argumentaba Núñez en su defensa, tienen opiniones políticas y modelos de gestión distintos, pero la altura de miras suficiente para lograr un acuerdo de mínimos que suponga un marco a partir del cual legislar y avanzar.

Un marco en el que VOX no estará, debido a su voto en contra en esta reforma del estatuto, gracias a su oposición al Estado de las Autonomías y a no tener la altura de miras suficiente para garantizar un marco de garantías y servicios públicos mínimos para Castilla-La Mancha.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio