Castilla-La Mancha ha vuelto a situarse entre las comunidades autónomas que más crecen económicamente en España. Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Producto Interior Bruto (PIB) de la región ha aumentado un 29,5% desde 2019, lo que la convierte en la tercera comunidad con mayor incremento del país desde la pandemia del Covid-19, sólo superada por Baleares (29,8%) y Madrid (29,6%). Muy por encima, además, de la media nacional, fijada en el 27,2%.
Este avance consolida a Castilla-La Mancha como una de las autonomías que más riqueza han generado en los últimos años, y que, según su presidente, Emiliano García-Page, ha logrado “recuperar el tiempo perdido” gracias a una estrategia basada en la cohesión social, la inversión pública y la estabilidad institucional.
“Estamos entre los primeros puestos en crecimiento y en generación de riqueza, y lo hemos conseguido como una sociedad cohesionada”, ha subrayado García-Page.
“La riqueza se consolida porque lo hace en una sociedad con buenos servicios públicos, que sabe que hay que avanzar todos juntos. No se trata de que unos tengan mucho y salvemos la estadística, sino de que realmente lo compartamos”.
Castilla-La Mancha sale de su trayectoria habitual
El presidente ha destacado, además, que los datos del INE demuestran que Castilla-La Mancha ha conseguido salir de su trayectoria habitual, superando a regiones vecinas que tradicionalmente habían liderado los índices de crecimiento.
“Nos hemos colocado en una senda de crecimiento muy por delante de otras regiones, y eso no es casualidad: hemos sabido aprovechar los recursos, invertir en servicios esenciales y crear un entorno estable que da confianza a empresas y familias”, ha defendido.
En un día festivo como hoy, me alegra especialmente conocer un buen dato económico para nuestra tierra: #CLM es una de las regiones con mayor crecimiento económico desde la pandemia.
— Emiliano García-Page (@garciapage) October 12, 2025
Un logro fruto del esfuerzo de todos. Crecemos más que muchas regiones que históricamente… pic.twitter.com/EgK6y5JEcB
Desde el año 2000, el PIB castellano-manchego ha crecido un 151,2%, siendo la cuarta comunidad con mayor avance en este periodo, sólo por detrás de Madrid (178,9%), Baleares (170,2%) y Murcia (160,4%). La media nacional, en ese mismo periodo, se ha situado en el 146,2%.
Retraso debido a los años de Cospedal
Sin embargo, este impulso podría haber sido aún mayor si la región no hubiera sufrido, en palabras del propio presidente, “cuatro años de enormes recortes” durante la etapa de María Dolores de Cospedal al frente del Gobierno regional. Un periodo que, según Page, frenó la modernización económica y social de Castilla-La Mancha y obligó a recomponer los pilares básicos del Estado del Bienestar cuando el PSOE volvió al Ejecutivo autonómico.
A pesar de aquel retroceso, la región ha logrado en la última década volver a niveles de competitividad y crecimiento comparables a los de comunidades como Madrid, con un modelo basado en la inversión pública, la digitalización del tejido productivo y el impulso a la industria agroalimentaria como motores de desarrollo.
Ritmo de crecimiento inferior en comunidades gobernadas por la derecha
Los datos del INE confirman que, mientras comunidades gobernadas por la derecha, como Castilla y León (25,1%) o Cantabria (23,6%), han mostrado un ritmo de crecimiento notablemente inferior, Castilla-La Mancha ha resistido mejor las consecuencias económicas de la pandemia y ha aprovechado la recuperación para avanzar en empleo, inversión y bienestar social.
Desde el Ejecutivo autonómico se subraya que este crecimiento sostenido no sólo se refleja en el PIB, sino también en otros indicadores: récord histórico de exportaciones, descenso del desempleo juvenil, crecimiento del número de empresas activas y una política fiscal que ha permitido equilibrar las cuentas públicas sin recortar derechos.