El líder del Partido Popular en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha exigido La "apertura inmediata" del nuevo centro de salud de Cabanillas del Campo, una infraestructura sanitaria que su propio partido paralizó durante la etapa de gobierno de María Dolores de Cospedal y que el Ejecutivo de Emiliano García-Page ha terminado de construir este mismo año.
La escena roza el esperpento político. Núñez, junto al portavoz del PP en la localidad, Daniel Martínez, y el diputado regional Nacho Redondo, ha denunciado "la burla permanente" que, según él, ejerce el Gobierno autonómico con los vecinos del municipio alcarreño. Lo ha hecho sin mencionar que fue precisamente el PP quien abandonó el proyecto en 2011, cuando ya existía un proyecto arquitectónico, maqueta y hasta licitación de las obras, iniciadas en tiempos del socialista José María Barreda al frente del Gobierno autonómico.
5,5 millones de euros de inversión
El nuevo centro de salud, que ha sido ejecutado en un plazo récord de un año por la empresa Edhinor, está situado en una parcela municipal de 4.000 metros cuadrados entre las calles Miró y Goya, junto a la carretera de Marchamalo. Se trata de un equipamiento moderno que dará cobertura a unas 15.000 tarjetas sanitarias, incluyendo a usuarios de Cabanillas del Campo, Torrejón del Rey y Valdeaveruelo. El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha invertido 5,5 millones de euros en la obra, cumpliendo los plazos y requisitos sanitarios.
Durante su intervención, el líder popular ha vuelto a referirse al actual centro sanitario, asegurando que fue diseñado para una población de 2.000 habitantes y hoy atiende a más de 11.000. Sin embargo, ha ignorado que los únicos años en los que el proyecto quedó completamente abandonado fueron aquellos en los que el PP gobernó la región y prefirió priorizar recortes frente a la expansión de infraestructuras sanitarias.
Núñez omite que fue su partido quien abandonó el proyecto
Pese a ello, Núñez ha calificado el centro como una promesa incumplida por parte del presidente regional. "Page lleva prometiendo este centro desde hace más de 10 años. Hace año y medio, en enero de 2024, montó una puesta en escena con una primera piedra simbólica. Y, sin ningún pudor, volvió a repetir exactamente el mismo acto el 15 de marzo de este año. Dos primeras piedras para un centro que sigue sin abrir", ha criticado, eludiendo el hecho de que durante los cuatro años de presidencia de Cospedal ni siquiera se mantuvo la intención de retomar el proyecto.
Con todo, el episodio vuelve a reflejar la incoherencia del discurso del PP en Castilla-La Mancha, donde su líder reclama públicamente lo que su propio partido bloqueó durante años, sin asumir responsabilidades ni reconocer el esfuerzo inversor que ha supuesto retomar y culminar un proyecto olvidado por los gobiernos del PP.
La historia del centro de salud de Cabanillas del Campo es también la historia del trato que el PP de Cospedal dio a la sanidad pública. Promesas que acabaron en el cajón, recortes estructurales, cierres de urgencias y paralización de obras. Ahora, que por fin se ha construido, Núñez exige lo que su partido impidió.