El Partido Popular, con Isabel Díaz Ayuso como protagonista, ha organizado un acto de campaña en Torrejón de Ardoz. En esta localidad madrileña, un feudo del PP desde hace años, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha tildado de “farsa” el proyecto del Gobierno central: “El proyecto de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ha fracasado: está acabado, en caída libre y es un proyecto hipócrita”, al tiempo que alababa la gestión del Ayuntamiento.

Pero una de sus declaraciones más controvertidas en este acto ha llegado cuando ha hablado sobre las amenazas que han recibido ya varios rostros públicos, como son Pablo Iglesias, Fernando Grande-Marlaska y María Gámez, por un lado, y la ministra Reyes Maroto por otro, que ha denunciado este lunes la llegada de una carta con una navaja aparentemente ensangrentada.

En este sentido, Ayuso ha defendido que la izquierda “está pasando una campaña tormentosa e inestable”, aunque fue más explicita: “Nosotros condenamos todo tipo de violencia, ahora bien, todos recibimos, en algún momento, amenazas. La diferencia es que unos no los comentamos y no hacemos circos”. En este momento ha revelado que su nombre ha estado en una “lista yihadista”.

Asimismo, ha criticado y recordado un momento que vivió en sus vacaciones de verano: “Llegaron las vacaciones de verano y Pedro Sánchez se fue tres semanas, y yo me fui tres días. Tuve a los medios de izquierda machacándome por tomarme una cerveza en un bar de carretera”. También ha arremetido contra Pablo Iglesias​ por llegar en taxi al debate electoral que se celebró la pasada semana en Telemadrid: “¿No es más hipócrita llegar a un debate en taxi?”.