La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha abierto a pactar con Vox si la aritmética tras las elecciones autonómicas del 28 de mayo deja un escenario en el que para ser presidenta requiera los votos de la ultraderecha. Así lo ha asegurado la líder regional en una entrevista en Onda Cero apenas 24 horas después de haber escenificado su ruptura con la formación de Rocío Monasterio. En sus declaraciones también ha asegurado que el aborto "no es un derecho" y ha explicado por qué quiere que imputen a su exconsejero de residencias, Alberto Reyero.

Bajo el pretexto de "no eternizarse en ninguna responsabilidad política", la líder de la Comunidad de Madrid ha asegurado que "hay responsabilidades que erosionan mucho" y cree que es "bueno saber cuándo uno puede convertirse en el problema y saber marcharse". "Ha habido mucha gente que me ha regañado por la calle. Dicen que si los ciudadanos han decidido que me quedo no debo pensar en mas", aseguraba sobre las metas que se pone en la política a futuro.

Sobre su ruptura con Vox, ha explicado que no son socios. "Yo tengo 65 escaños y hemos tenido acuerdos parlamentarios", indicaba sobre diferentes acuerdos que han tenido con la ultraderecha y con el PSOE. Sin embargo, asegura que no es "equidistante" entre Vox y PSOE. "Hemos sido los dos partidos que más nos hemos entendido en cuestiones como las reducciones fiscales. Pero la deriva que han tomado, no quiero que me arrastre porque no estoy a favor de muchos de sus postulados. Han decidido que yo soy el enemigo y por delante se llevan todo lo que es bueno para Madrid. Aquí no tiene nada que ver Feijóo, sino los intereses de la Comunidad de Madrid", decía sobre Vox Ayuso.

"Ellos lo que necesitan es estar en titulares, por tanto, ahora durante unos días será aguantar mi decisión sobre si esta tiene que ver con Feijóo. Que hagan lo que consideren, pero no han traído unos Presupuestos trabajados", afirmaba asegurando que aunque no pactaría con la oposición, llevaron a la Asamblea 1500 enmiendas mientras que Vox solo llevó "80 y mal presentadas".

Carlos Alsina preguntaba a la presidenta de la Comunidad de Madrid si la ruptura que escenificó este jueves en la sesión de control de la Comunidad de Madrid será hasta el 28 de mayo. En un primer momento, Ayuso ha explicado que, a diferencia de Vox, ella no ve la vida "en blanco y negro". Además, ha explicado que, aunque es su socio prioritario, "lo hacen todo muy complicado".

"Me gustaría no necesitarlos, pero también habrá que ver la situación en las urnas. Yo no soy equidistante, pero a mí me gustaría no tener que ver cómo Madrid se queda sin presupuestos o sin unas deducciones fiscales que son buenas para atraer inversiones", reconocía sobre una posible casuística en Madrid en la que pueda volver a ser presidenta con los votos de la ultraderecha.

"Me gustaría volar libre", reconocía al respecto. "Me gustaría gobernar para todos los madrileños de una manera coherente y en base a unos principios. Ahora mismo, lo hago en muchas ocasiones porque tengo un Gobierno gracias a la mayoría que me dieron en las elecciones", indicaba. Además, reconoce que la relación a su derecha no es mala. "Me consta que los diputados cuando han tenido que negociar, han tenido una relación cordial. A veces partimos de un mismo diagnóstico, pero luego se complica". "No entienden de matices, siempre tienen la razón de las cosas", indicaba.

La imputación de Reyero

Este jueves la presidenta de la Comunidad sorprendía a todos respondiendo a Mónica García que esperaba que imputaran a su exconsejero de Políticas Sociales, Alberto Reyero. "He vivido esa situación. Hay que tener en cuenta que no se ha aplicado en la Comunidad de Madrid nada que no se haya hecho en otras comunidades", explicaba la líder madrileña, que ha reconocido que el protocolo "no se firmó" y que "se filtró" pese a que hablaba sobre qué hacer en caso de que hubiera más fallecidos. "Muchos geriatras tomaban esas decisiones viendo cada caso. Decidían si se quedaban en la residencia o acudían a los hospitales", añadía.

Además, explicaba el porqué de sus palabras contra Reyero. "Creo que lo que toca es que le pregunten qué hizo él y qué responsabilidades tenia", insistía. "Así puede empezar a hablar de él. O de Pablo Iglesias, que se quiso responsabilizar", agregaba asegurando que en tres años el exconsejero de Ciudadanos solo ha atacado al PP. "Yo no recibía información sobre lo que él hacía. Tengo la sensación de que no hacía absolutamente nada. Esa competencia estaba delegada porque era un gobierno de coalición", indicaba.

El aborto no es un derecho

Hacia el final de la entrevista, Isabel Díaz Ayuso ha indicado que "el aborto acaba con una vida" y que, por tanto, "no es un derecho".  "Cuando una persona aborta no hace una interrupción voluntaria. La vida se va y no viene otra. Tiene que permitirse, pero no es un derecho", se posicionaba tachando de "error" que se promueva. "Es contranatura decir que es una liberación de nada". "Estoy a favor de la vida y respeto y defiendo que sea una decisión que deba tomar cada mujer. Libertad si, derecho no es", concluía.