La UNESCO vuelve a advertir de que el Parque Nacional de Doñana entrará a formar parte de la Lista de Patrimonio Mundial en Peligro. El documento apela al Estado a tomar medidas y corregir actividades extractivas en el Parque, a la par que alerta de tendencias irreversibles por la sequía, en el contexto de cambio climático, si no se toman medidas urgentes.

La mayor parte de las referencias del documento aluden a competencias de la Junta de Andalucía y, entre otros factores agravantes, al plan de Moreno Bonilla para legalizar hectáreas de regadío en la corona norte de Doñana. Expresiones como “máxima preocupación”, “extremar precauciones” o “peligro potencial” ribetean cada párrafo del nuevo informe.

Ya en mayo la UNESCO alertó de que los cambios legislativos que promovía la Junta de Andalucía podrían amenazar el reconocimiento del de Doñana como Patrimonio Mundial de la UNESCO. Doñana, que es también Reserva de la Biosfera de la UNESCO desde 1980, se ve expuesta no solo a la sequía, sino a la sobreexplotación del acuífero y al retraso de la ejecución del Plan Hidrológico.

Por ello, en el nuevo documento la UNESCO insta a la creación de un plan estratégico con medidas de adaptación y mitigación al cambio climático que deberá estar en funcionamiento en diciembre de 2024. A pesar del tono diplomático, el ultimátum para frenar el deterioro de Doñana está servido.  

La UNESCO señala que “es motivo de gran preocupación” la Proposición de Ley (PL) que se tramita en el Parlamento de Andalucía, impulsada por el PP, para legalizar las hectáreas de regadío en zona forestal, a pesar de la promesa “de que no se concederían derechos de agua adicionales del acuífero en el futuro”. La UNESCO recuerda que la PL es contraria a las observaciones realizadas por su propia Misión de Observación de 2020 y a la legislación vigente en Andalucía hasta ahora, el conocido como ‘Plan de la Fresa’, “lo cual es crucial para preservar la calificación de Valor Universal Excepcional”

El hecho de que tres cuerpos de agua subterránea continúen sobreexplotados desde 2020 sigue siendo “motivo de preocupación, especialmente considerando la incertidumbre científica aún sin resolver sobre el impacto de la extracción de agua del acuífero sobre el Valor Universal Excepcional (UVE)”.

Esfuerzos insuficientes

Aunque el documento reconoce los esfuerzos realizados para reducir la sobreexplotación del acuífero con inspecciones continuas y cierres de pozos ilegales, así como la reubicación de los pozos contiguos a Matalascañas, da un tirón de orejas, teniendo en cuenta que “se esperaba que el Plan Hidrológico de la cuenca del Guadalquivir (2021-2027) estuviera finalizado a finales de 2022”.

El papel que está teniendo la sequía en la calificación del Parque es igualmente resaltado por el documento. “Dos de los cinco hábitats principales (marismas y lagunas) casi han desaparecido en 2022, afectando también a la laguna de Santa Olalla”, que era hasta la implosión de esta sequía la única gran laguna permanente del Parque.

La“La dramática disminución”  de aves migratorias es el otro principal argumento del documento. Menciona especies clave para para el calificativo de Valor Universal Excepcional , no hay confirmación de que este año se hayan reproducido algunas de ellas, como gansos grises o águilas reales y sí se ha constatado que algunes especies migratorias están cambiando su periplo, dejando atrás el que fuera el principal hospedaje para aves migratorias de Europa occidental. De hecho, respecto a 2005 hay una disminución del 54% de aves.

No se refiere la UNESCO, sin embargo, a la pérdida de otras especies que no sean aves, ni a la degradación de hábitats como las dunas o el bosque negro, que el CSIC viene dejando patente. La pérdida del 19% de las 267 lagunas muestreadas por los investigadores de la Estación Científica de Doñana reduce drásticamente las posibilidades de reproducción de anfibios como sapos, libélulas, caballitos del diablo o una especie de galápagos autóctonos, ya incluida con anterioridad en listas rojas de preservación de especies europeas.

La vuelta de la pesadilla de Aznalcollar

Ante todos estos hechos, el documento reitera la importancia de implementar medidas para reducir el uso de aguas subterráneas y aumentar así la resiliencia del Parque. Pide con urgencia la creación de un modelo ecohidrológico  junto a un plan estratégico que dé garantías ante un futuro incierto, no solo por la lenta respuesta respecto a la protección de los acuíferos, sino también, por las tendencias que imponen el cambio climático y porfactores humanos, como la vuelta de Aznalcóllar.

Las minas de Aznalcóllar son un angustioso recuerdo para Andalucía y suponen uno de los mayores desastres ambientales de Europa. Los planes para su reapertura son otro motivo de fragilidad extra para el calificativo patrimonial de Doñana. Por ello, piden la preparación “sistemática de riesgos y de planes de acción de emergencia”, teniendo en cuenta la protección y gestión de Doñana, “antes de que se tomen decisiones finales o irreversibles con respecto a la reapertura de la mina”.

Todas estas respuestas las solicita la UNESCO, a más tardar, el 1 de diciembre de 2024, de cara al examen de la Convención en Riad, Arabia Saudí. Los deberes que impone UNESCO precisan de un consenso que no se espera entre el MITECO y la Junta de Andalucía, que sigue empeñada en mantener su hoja de ruta respecto a las explotaciones agrarias ilegales, que vienen afectando al acuífero del que debía beber Doñana. WWF, respalda el comunicado de UNESCO por la obligatoriedad de “actuar urgentemente para evitar que Doñana llegue a un punto de no retorno”.

La entidad ambientalista, pionera en la denuncia de las extracciones ilegales del acuífero, insta nuevamente a Moreno Bonilla a retirar “de manera inmediata” su Proyecto de Ley para recuperar el antiguo Plan de la Fresa. La necesidad de consenso con el Gobierno central para un plan ambicioso y conjunto, es demandando también, por el movimiento ecologista. “Esperemos que esta vez –Moreno Bonilla– haga caso y empiece a trabajar para cumplir con su responsabilidad internacional”, señala WWF.

Sin embargo, tras las vacaciones y tras el primero Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, la tónica parece seguir siendo la misma. La Junta pide a Madrid y a Bruselas que “arrimen el hombro” para más inversiones hídricas en lo que califican como una “llamada de auxilio”. El enfrentamiento político parece que seguirá marcando el nuevo curso político mientras Doñana, cada vez menos valiosa, sigue esperando un milagro.