“Hace un año, Andalucía abrió un nuevo ciclo con la ilusión de construir la mejor Andalucía de nuestra historia y creo, humildemente, que estamos en el camino correcto", hasta el punto de que "Andalucía se está convirtiendo en un ejemplo para España", pues "mientras la incertidumbre es una amenaza en otros territorios, Andalucía es un modelo de estabilidad política, de diálogo, acuerdo y moderación, y un ejemplo de regeneración y de crecimiento económico".

En su primer discurso de Navidad como presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno no se diferenció mucho de sus antecesores socialistas: practicó sin empacho el género político del autobombo, eludió los aspectos más comprometidos de un mandato que fue posible gracias a los votos de la ultraderecha, a la que no mencionó, prometió “una nueva Andalucía” y advirtió al futuro Gobierno de PSOE y Unidas Podemos con apoyo independentista que no permitirá “privilegios” a ningún territorio, en alusión a Cataluña y el País Vasco.

El presidente eligió para pronunciar este discurso el municipio de Cumbres de Enmedio, en la Sierra de Huelva, el pueblo más pequeño de la comunidad autónoma con 52 habitantes, a fin de transmitir su "firme compromiso" con la Andalucía rural.

357 palabras

En el tramo final de su intervención el presidente aludió a la violencia de género, aunque muy brevemente y escogiendo palabras que no irritaran a sus picajosos aliados de Vox. He aquí los dos pequeños párrafos, con un total de 357 palabras, que Moreno dedicó a una tragedia que viene situando a Andalucía en los primeros puestos del ranking nacional de mujeres asesinadas:

“Todos llevamos en el corazón el recuerdo de las pérdidas personales sufridas, pero quiero tener especialmente presentes a todas las mujeres asesinadas por la violencia machista.

Estamos haciendo y vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para luchar contra esta lacra. No vamos a dar ni a tolerar un solo paso atrás en la protección de las víctimas”.

El 'milagro de Moreno'

Aunque solo lleva once meses como presidente, Juanma Moreno habría conseguido atraer capitales extranjeros a un vertiginoso ritmo que, además, contrastaría con el fracaso de España en ese mismo espacio de tiempo:

“Somos la tercera locomotora económica de España, y en este primer año hemos afianzado esa posición porque Andalucía, hoy, funciona y genera confianza. Mientras que en el conjunto de España la inversión extranjera ha caído un 61%, en Andalucía sube exactamente ese mismo porcentaje, un 61%. Somos la segunda comunidad que más exporta de España a otros mercados y la tercera en afiliados a la Seguridad Social, y confío en que podamos mejorar esa posición también”.

La ‘nueva Andalucía’ que preside "funciona y genera confianza" porque “ha abierto puertas, ventanas y cajones” y "vive hoy tiempos de regeneración y de recuperación del orgullo de ser andaluces”.

Breve mención de la sanidad

Tampoco faltaron en el discurso del presidente alusiones a sus adversarios, hoy desalojados del poder tras 37 años. Moreno dijo no mirar al pasado, pero lo cierto es que algo sí que miró:

“No es tiempo de mirar atrás, sino adelante, de superar la melancolía, los clientelismos, las conductas impropias y los ejercicios de soberbia. Es tiempo de asumir que los gobernantes somos servidores y estamos sujetos a la Ley, sin excusas de ningún tipo”.

Significativamente, la sanidad y la educación apenas merecieron una alusión casi de pasada, pese a haber sido la primera de ellas la principal bandera política del Gobierno. Consciente seguramente de la distancia insalvable entre lo mucho prometido y lo poco realizado, el presidente se limitó a decir esto:

"Partimos de un amplio déficit en materia sanitaria y educativa. Lo sabemos y, por eso, hemos incrementado en 1.300 millones de euros el presupuesto en sanidad y educación. Resolver los problemas que seguimos teniendo se puede conseguir en parte con nuevos modelos de organización, escuchando y atendiendo las sugerencias de los profesionales que os dejáis la piel a diario y que sois quienes mejor conocéis esos servicios públicos. 

Pero además de la dedicación, el esfuerzo, una buena organización y la mejor voluntad de todos, se necesitan recursos públicos, se necesita dinero, y para eso, y no para otra cosa, exigimos al Gobierno de España el pago completo de su deuda con Andalucía y la mejora del actual sistema de financiación".